La eventual construcción de megarrepresas en el río Marañón, que es uno de los más importantes que tiene nuestro país, puede causar un desastre socio ambiental, cuyas consecuencias no solo afectará a dicha cuenca sino también a toda la Amazonía baja.
Así lo advirtieron diversos y destacados especialistas que coincidieron en trazar como un desafío con acciones y políticas públicas concretas, la enorme importancia de proteger al río Marañón, principal afluente del río Amazonas.
Durante el conversatorio “Centrales hidroeléctricas en debate”, organizado por la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA) como parte del evento “El Perú que necesitamos”, los expertos dieron a conocer varias razones por las que los principales ríos andino-amazónicos no deberían ser represados.
Bruno Monteferri, director de Conservamos por Naturaleza, sostuvo la importancia de proteger el río Marañón debido a su vulnerabilidad geográfica, ya que está ubicado en un punto de conexión natural entre los Andes y la Amazonía peruana.
Explicó que la construcción de megarrepresas bloquearían el flujo de sedimentos entre el río Marañón y el río Amazonas, provocando la migración de peces y una posible inundación de cientos de comunidades indígenas y ribereñas. Por ello, resaltó que las autoridades y el Estado deben tener claro cuáles son los proyectos que ya no cuentan con certificaciones ambientales vigentes.
“Desde un punto de vista de transparencia, el registro de Senace debería indicar cuándo las certificaciones ambientales ya no se encuentran vigentes”, dijo Monteferri respecto a los proyectos de megarrepresas en el río Marañón.
Al analizar el caso de los proyectos Veracruz y Chadín 2 planificados en el río Marañón, Sandra B. Correa, profesora de la Universidad de Mississippi, mencionó los riesgos ambientales y sociales que hay al construir este tipo de infraestructuras en ríos con alta importancia en términos de conexión.
“El Perú tiene las cabeceras de muchos de los ríos amazónicos de la región, por lo que este tipo de construcciones de represas pueden causar grandes riesgos en términos de conexión”, afirmó.
PROYECTOS ENERGÉTICOS CON MENOR IMPACTO
Frente a desafíos como una planificación de fuentes de energía más sostenibles en el país, Claudio Helfmann, gerente de desarrollo de negocios en Enel Green Power Perú, sostuvo que en un contexto de Cambio Climático es crucial apostar por proyectos energéticos con el menor impacto posible en el planeta.
“Nos estamos orientando a energías renovables y con el menor impacto posible en el medio ambiente, por lo que estamos abandonando los grandes proyectos hidroeléctricos”, agregó. Refirió que el proyecto Veracruz, pensado en construirse en el Marañón, ya no forma parte de la cartera de proyectos de Enel.
Mientras que Cesar Butrón, presidente del COES, señaló que el Perú tiene una demanda de energía cubierta para los próximos años. En ese sentido, sostuvo la oposición a la construcción de este tipo de infraestructuras en distintos países de la región y el mundo.
Además, dijo que “en un contexto en el que la energía social y eólica son más competitivas, las construcciones de centrales hidroeléctricas con represas ya no son una opción”.
Como se sabe, el río Marañón nace en Huánuco, pasa por Áncash, La Libertad, San Martín, Cajamarca, Amazonas y en Loreto se une con el Ucayali para formar el río Amazonas, se informó a INFOREGIÓN.
Nota:
-Este conversatorio puede encontrarse completo en la página de Facebook de la SPDA, así como también en el canal de Youtube.