En un aparente ajuste de cuentas, sujetos desconocidos acribillaron de varios balazos a tres integrantes de una familia en el caserío El Pijuayal, cerca de la localidad de San Alejandro, distrito de Irazola, provincia de Padre Abad. Padre e hijastro murieron en el acto, mientras que la madre resultó gravemente herida.
Las víctimas fueron identificadas como Sebastián Lizara Laura, de 43 años y su hijastro Alexander Bendezú Tolentino, de 10 años, mientras que la mujer herida es Emilia Tolentino de 40 años, quien se salvo de morir.
Según varios testigos, cinco sujetos con pistolas y en dos motos lineales interceptaron a la familia cuando regresaban de su fundo y sin mediar palabra alguna les dispararon a quemarropa.
Las víctimas, que regresaban en una moto lineal a San Alejandro, cayeron al piso impactados por los impactos de las balas, uno encima del otro mientras los asesinos continuaban disparando.
Sebastián Lizara y el niño Alexander, murieron en el acto por los disparos recibidos, mientras que Emilia Tolentino resultó gravemente herida, pero viva, protegida al parecer por los cuerpos de sus dos seres queridos.
Los comuneros de la zona al oír los disparos salieron a la carretera y encontraron a las tres víctimas en medio de un charco de sangre y al ver a la mujer aún con vida, la trasladaron de emergencia al Hospital Amazónico.
Sin embargo, INFOREGION pudo constatar que no llegó a ser ingresada a ese nosocomio y se desconoce su paradero.
Mientras tanto, los cuerpos de Sebastián Lizara y el menor Alexander Bendezú fueron levantados por el Ministerio Público y posteriormente trasladados a la morgue de Pucallpa.
Por la modalidad del crimen, para la policía se trataría de un ajuste de cuentas del narcotráfico.