La delegación de facultades legislativas al Poder Ejecutivo que otorgó la Ley N° 30073 (que implica un total de 23 Decretos Legislativos) “debió concretar normas para que la población pueda acceder pronto al derecho a la salud con atención integral”, señaló la Academia Peruana de Salud a INFOREGIÓN.
En un pronunciamiento público, esta institución aseguró que los Decretos Legislativos no son elaborados en un proceso participativo y eluden cuatro grandes problemas del sector: el aseguramiento inequitativo y excluyente con carencia de financiación efectiva (por lo que dos tercios de peruanos no tienen acceso a la atención integral de salud); un sistema nacional de salud con desempeño, coordinación y capacidad resolutiva ineficientes, rectoría involutiva y severa inestabilidad durante 35 años; recursos humanos con numerosas insuficiencias, además de una migración creciente al extranjero sin retorno de 16 mil446 profesionales; y la ausencia de una política de Estado que varia con cada gobierno.
Además, acusan a estas políticas de “privilegiar el mercado sobre el derecho a la salud”.
“En la priorización del mercado se tiene, entre otros, el D.L 1158 que profundiza las inequidades de la Ley de Aseguramiento en Salud N° 29344 del 2009 y debilita aún más la rectoría del Ministerio de Salud, al dejarlo en minoría absoluta en el Consejo Directivo de la Superintendencia Nacional de Salud”, precisan
PROPUESTA
La Academia Peruana de Salud propone que, el Congreso de la República, al tomar conocimiento de los Decretos Legislativos que autorizó la Ley N° 30073, “realice un proceso técnico-político de perfeccionamiento concertado de las normas y construya una Política de Estado en Salud en coordinación con la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM)”.
Para esta institución, esta política se debe concretar el 2014 en una Ley de Aseguramiento Social Universal en Salud “solidario, inclusivo, equitativo, ético, obligatorio, factible, moderno y progresivo”.
Este seguro debe financiarse con estrategias efectivas, recaudación con tecnología de última generación y una inversión mayor al promedio sudamericano.
“Es indispensable la incorporación contributiva de todos los trabajadores formales e informales a fin de recaudar con equidad sus aportes a través de las ventas y servicios, y contar con la participación complementaria del sector privado sin seguros alternativos al seguro social porque incrementan la inequidad y la exclusión”, señala el comunicado de pronunciamiento.
La Academia sugiere que las prioridades del Estado debe tener en cuenta: alcanzar pronto el desempeño eficiente del Sistema Nacional de Salud, así como desarrollar su organización y funciones coordinadas; fortalecer cabalmente la rectoría, terminar con los vaivenes y evaluarlo periódicamente.
Además, los servicios del sistema deben tener recursos humanos debidamente formados, capacitados y remunerados, un Serum moderno y una adecuada infraestructura, equipos y medicamentos.
“Es imprescindible resolver el grave problema de las masivas migraciones sin retorno de los profesionales ocurridas en los últimos años”, destacan.
La institución agregó que desde hace más de 12 años “el Perú tiene condiciones económicas y técnicas para el desarrollo en salud y aseguramiento”.
“Es hora de realizar una reforma exitosa en el sector, por lo que se invoca a todos a concertar una política de Estado en salud, cuyo desarrollo y estabilidad trascienda a los distintos gobiernos como nación”, concluye el pronunciamiento.