Pese a encontrarse en una de las zonas más vulnerables del planeta, los países de latinoamérica, incluido el Perú no se encuen tran debidamente preparados para afrontar los efectos negativos del cambio climático.
Así lo advirtieron expertos en gestión ambiental de las Contralorías de Brasil, Argentina, Costa Rica, Panamá, El Salvador, Paraguay y Perú, reunidos en Lima para analizar el resultado de las investigaciones realizadas en torno a las políticas y acciones adoptadas por los gobiernos de esos países respecto a los retos ambientales.
En la cita, el Contralor General del Perú, Fuad Khoury, explicó que de acuerdo a las conclusiones a las que llegaron los expertos “no se han logrado medidas concretas de adaptación al cambio climático. A pesar de ser conscientes de la alta sensibilidad de la región y de haber iniciado procesos de identificación de zonas geográficas y sectores socioeconómicos más vulnerables, esta labor fundamental está aún rezagada”.
Khoury explicó que la acción gubernamental no se ha concentrado en mitigar la deforestación y la contaminación provocada por el transporte, a pesar de ser “las principales fuentes de emisiones de gases de efecto invernadero en la región.
Auditoría sobre la deforestación
El contralor informó que en el caso del Perú, la Contraloría está desarrollando una auditoría sobre deforestación la misma que estará lista a fines del tercer trimestre del 2011.
Añadió que se ha concluido que “existen vacíos organizativos para institucionalizar la gestión del problema climático, en la definición de roles y responsabilidades, así como en el establecimiento de metas cuantitativas en las políticas, estrategias o planes que permitan evaluar las acciones previstas”.
El Contralor dijo que tanto en el Perú, como en los países participantes, “hay un débil apoyo y difusión de las investigaciones relacionadas al cambio climático, evidenciada en las limitaciones técnicas para la identificación de vulnerabilidades y riesgos, la recopilación de datos y en la formulación de metodologías para estimar las emisiones en los inventarios de gases de efecto invernadero”.