El cuerpo humano no asimila las proteínas y nutrientes de la hoja de coca

Las proteínas y los nutrientes que posee la hoja de coca no son asimilables por el organismo humano por lo que quienes defienden el cultivo de la planta con fines alimenticios están en un error, señaló el jefe del área de investigaciones de CEDRO, Alfonso Zavaleta.


 


En conversación con Diálogo Ciudadano, programa de INFOREGIÓN, sostuvo que la hoja de coca tiene proteínas casi en un 20 por ciento, pero -por su condición vegetal- son incompletas y deficitarias para el ser humano.


 


«Lo cierto es que las pruebas que se han hecho, utilizando proteínas extraídas de la hoja de coca y dadas a animales en crecimiento, han dado por resultado que el animal baje de peso o que, en muchos de ellos, dependiendo de la dosis, se muera», resaltó Zavaleta al precisar que estas proteínas no son buenas para el ser humano.


 


En cuanto a las vitaminas contenidas en el referido producto, señaló que es cierto que se puede encontrar vitamina A, pero en mucho menor porcentaje que, por ejemplo, en la zanahoria.


 


En ese sentido, refirió que «el problema de la hoja de coca es que tiene, junto a estas vitaminas, los alcaloides, entre ellos la cocaína, y de los trece que tiene hay varios otros que también son tóxicos para el ser humano, por lo que no sería una fuente segura para obtener vitamina A o cualquier otra».


 


Propiedades medicinales de la coca se basan en estudios de 1820


El especialista de CEDRO señaló, además, que las diversas propiedades medicinales que se le atribuyen a la planta se basan en estudios del año 1820 y fueron realizados por el médico Hipólito Unanue, además de centrarse principalmente en la acción del alcaloide de cocaína.


 


Recordó al respecto que el alcaloide de cocaína representa casi el 90 por ciento de los que contiene la hoja de coca y que su consumo genera fármaco dependencia.


 


Finalmente, sobre un posible uso industrial de la hoja de coca, el doctor Zavaleta sostuvo que no existe ninguna propuesta que sea económicamente rentable, pues se toma como modelo a algunas empresas bolivianas muy pequeñas, que no soportarían una economía de escala y que tienen un mercado muy restringido.