El otorgamiento de facilidades tributarias al café importado por parte del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), sigue recibiendo severos cuestionamientos debido a que fomenta la competencia desleal con el producto nacional, y desincentiva la apuesta por los cultivos alternativos en las zonas cocaleras.
“Con esta rebaja arancelaria, la importación de café puede llegar hasta 20 millones de dólares este año cuando en el 2005 el producto extranjero entraba solo por un monto de 600 mil dólares”, manifestó el gerente general de la Junta Nacional del Café, Lorenzo Castillo.
En entrevista con el informativo Diálogo Ciudadano que se transmite a través de Radio Infovrae en el valle de los ríos Apurímac y Ene, Castillo dijo en forma irónica que, “a este paso, en lugar de celebrar el Día del Café Peruano tendremos que celebrar el Día del Café Importado”.
De otro lado, advirtió que con la aplicación de la nueva estructura arancelaria, el mercado peruano no solo se verá invadido de café de baja calidad sino que, incluso, gente inescrupulosa puede procesar cáscara de café para sorprender a los consumidores.
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