Greenpeace pidió al gobierno japonés ampliar la zona de evacuación de los alrededores de la central nuclear de Fukushima y comenzar el traslado por los niños y las mujeres en estado de gestación, ya que son los colectivos más vulnerables a padecer alteraciones como consecuencia de la radiación.
“Nuestro equipo ha constatado que la zona de evacuación de 20 kilómetros alrededor de Fukushima/Daiichi es insuficiente y que en la localidad de Iitate, que se encuentra a 40 kilómetros y está fuera del área de evacuación se han detectado niveles muy altos de radiación”, señala.
La organización ecologista internacional explica que esta situación provoca que en pocos días sus siete mil habitantes reciban la dosis máxima permitida de radiación para todo un año.
A esto se suma que la Prefectura de Fukushima y el Ministerio de Ciencias japonés también confirmaron los niveles de radiación por encima de lo permitido, e incluso el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) mostró su preocupación por los habitantes de la localidad nipona de Litate.
“No obstante, el Gobierno nipón niega la evidencia y rechaza aumentar la zona de evacuación. Al día de hoy, la central nuclear nipona de Fukushima/Daiichi sigue liberando partículas radiactivas que son propagadas al medio ambiente por el viento llegando incluso a miles de kilómetros de distancia”, sostiene Greenpeace.
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