En entrevista en Radio San Borja, Gino Costa informó que un instrumento fundamental para enfrentar el narcotráfico y blindar el sistema financiera de dinero sucio es la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) que se encuentra en la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS).
“Con la información que proporcionan los bancos en los últimos años, la UIF ha comunicado más de 450 transacciones sospechosas al Ministerio Público, pero sobre ellas no ha recaído ninguna sentencia, no se ha ejercido ninguna responsabilidad. Esto se debe a que no hay capacidad de investigación en profundidad”, afirmó.
Agrega que esta situación es producto de la falta de decisión, voluntad política y liderazgo. Otro factor sería la corrupción. Debido a esto, aún el Perú no cuenta con un sistema mínimo para el control de los insumos químicos.
El software que se necesita ha sido identificado y es posible hacer un seguimiento de los insumos químicos que se producen en el país y de los que se importan, desde el momento que llegan al aeropuerto y a su destino final. A pesar de que la tecnología está disponible y se debe poner en práctica, aún no se hace.
En cuanto a la lucha contra el narcotráfico, el Estado ha avanzado en el Alto Huallaga, pero en el VRAE ha ocurrido lo contrario. “Las Fuerzas Armadas no han tenido éxito en el enfrentamiento porque emplean estrategias pasivas. Se hace un gran esfuerzo, hay muchas víctimas, pero no hay senderistas detenidos”, sostiene.
Afirma que para lograr mayores resultados se requiere de mayor presencia de la policía porque tiene experiencia en este tema al enfrentar a Sendero Luminoso en el Alto Huallaga.
Próximos desafíos
Otro tema que evalúa Ciudad Nuestra en el libro Inseguridad en el Perú ¿Qué hacer?, son las protestas sociales. A pesar de haber disminuidos se han hecho más violentas. Es necesario contar con un sistema para la alerta temprana y la prevención y el manejo pacífico de los conflictos.
“Es inaudito que diez años después de haberse restablecido la democracia y haber sido el conflicto social una fuente de tanta inestabilidad política, concluyamos la década sin un sistema mínimamente organizado para enfrentar los conflictos. Estos tienen incidencia sobre la gobernabilidad y también sobre la inversión y el desarrollo económico”, afirma.
La inseguridad en las calles es otro tema que debe ser considerado por el próximo gobierno. El Perú encabeza la tabla de posiciones de Latinoamérica donde la gente se siente más insegura. “Es paradójico que después de años de crecimiento económico, caída de la pobreza y del desempleo, tengamos estos resultados”.
En similar situación se encuentran los pares de Argentina, Ecuador, Venezuela y Bolivia. El punto en común con ellos es la confianza ciudadana en sus fuerzas policiales. Ese es el principal problema que hay que revertir.
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