Con un mayor control de parte de todas las autoridades del Estado, las rutas de la trata de personas en nuestro país tenderán a reducirse, tanto hacia las zonas de explotación minera de Madre de Dios y Puno, como desde las áreas de captación o tránsito, ubicadas en Ayacucho, Huancavelica y Junín.
Lo dijo la ministra de la Mujer, Virginia Borra, en entrevista con el programa Diálogo Ciudadano, que se emite vía Radio Aurora de Puerto Maldonado en coproducción con INFOREGION.
La ministra explicó los avances de la campaña ‘Más control, menos rutas de explotación’, que se viene desarrollando en coordinación con las autoridades policiales y del sector Transportes y cuyo objetivo es establecer los mecanismos de verificación sobre las empresas de transportes que sirven para el traslado de personas captadas para ejercer la prostitución infantil y juvenil.
“Pensamos que estableciéndose estos niveles de control efectivo a las empresas de transporte puede reducirse el número de menores que lleguen a Madre de Dios”, explicó la autoridad del MIMDES.
Controles en puntos estratégicos
Borra dijo que para reforzar esta estrategia se ha previsto que en los puntos de acceso a los centros mineros de Mazuko, Mavila e Inambari, existan controles policiales, que permitirán evitar el ingreso de menores de edad.
Agregó que lamentablemente las penas para quienes resultan responsables de estos delitos son muy benignas y por ello su despacho coordinará con el Ministerio Público y el Poder Judicial para aclarar parámetros y detectar cuando el caso se vincula con la trata de personas.
En cuando a la atención de las víctimas, el Estado construirá un albergue temporal para niñas, para ayudar en la recuperación de aquella muchachas son atraídas con falsas promesas de empleo pero terminan ligadas a las mafias de la prostitución que las conducen a una situación de esclavitud sexual.