Las comunidades nativas de Nueva Shahuaya, Sawawo-Hito 40 y Santa Rosa, en Ucayali, ubicadas en la frontera con el Brasil, exigieron al Gobierno que delimite físicamente la frontera con dicho país para evitar la incursión de brasileños en territorio peruano, tal como sucedió en julio pasado, en que dos ingenieros de la Empresa Forestal Venao y dos nativos fueran secuestrados por el Ejército Brasileño cuando operaban legalmente en territorio peruano
Julio Reátegui, asesor legal de dichas comunidades, detalló que en la zona fronteriza casi no existe vigilancia policial, por lo que los comuneros plantean que una comisión de ambos países delimite físicamente los 40 kilómetros de frontera que hay entre los hitos 37 y 40.