La carretera de penetración hacia la localidad de Machente, en el valle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE) fue el escenario de un nuevo accidente, cuando una moderna camioneta, en la que viajaba una familias de misioneros, se salió de la pista y cayó a un abismo. Ninguno sobrevivió.
El accidente ocurrió el pasado viernes. Según fuentes cercanas, el cansancio del conductor y el pésimo estado de la carretera ocasionaron el accidente, ya que este condujo el vehículo – una camioneta Mitsubishi Montero de placa de rodaje RQV-907- a excesiva velocidad.
Todo comenzó la mañana del martes, cuando una familia de evangelistas se dirigía hacia la localidad de Pichari, en el valle de los Ríos Apurímac y Ene (VRAE) para participar de un Congreso de Evangelistas del movimiento misionero mundial, que se realizaría en Pichari.
El viaje marchaba sin contratiempos hasta que llegaron a la localidad de Tutumbaru cercano al distrito de Machente, zona que se caracteriza por estar rodeada de precipicios, árboles y una carretera de maltratada.
Pese a estas difíciles condiciones de la carretera, el conductor, habría continuado manejando a alta velocidad, hasta que el accidente puso fin al trayecto. No se descarta que se haya quedado dormido.
El rescate de los cuerpos requirió del apoyo de la policía y pobladores de la zona, debido a que la camioneta quedo atrapada entre la vegetación de la zona, la cual oculto los rastros del accidente.
Entre los fallecidos se encuentra Nilda Baceliza Quispe Yucra (53) su hijo Rubén Edgar Rojas Quispe (34) su sobrino Jhony Quispe Ramirez (27) y un pariente menor de edad identificado como Denis (14).
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