“Si el bosque es un buen negocio, nadie lo va a destruir”

El coordinador de la Secretaría Técnica del Proceso de Revisión y Actualización de la Legislación Forestal, Gustavo Suárez de Freitas, sostuvo que la nueva Ley Forestal y de Fauna Silvestre garantiza el buen uso y la protección de los bosques, y señaló que quienes critican la norma mencionada, y su proceso de elaboración, pretenden hacer creer que el no uso de los recursos es lo que los conserva.

“Lo fundamental es que el bosque sea un buen negocio, si el bosque es un buen negocio nadie lo va a destruir”, aseguró.

“Lamentablemente, en nuestro país hay una tendencia que pretende hacer creer que el no uso de los recursos es lo que los conserva, cuando en todo el mundo se sabe que el no uso de recursos lleva a la destrucción y el uso económico sostenible lleva al mantenimiento. Pero acá hay posiciones ideológicas frente a las cuales me declaro incompetente para convencer a la gente, no soy predicador, yo soy ingeniero y digo las cosas como son, nada más”, señaló en el programa Diálogo Ambiental de INFOREGIÓN.

En otro momento, Suárez de Freitas insistió en responder a quienes cuestionan la nueva Ley Forestal y dijo que “no podemos negarnos al desarrollo y a la utilización de los recursos pensando que alguien podrá hacer algo mal”. “Todo está planteado de manera clara, transparente y objetiva, pero hay posiciones fundamentalistas, y hay algunos que ven una pared verde pero dicen que es roja”, expresó.

Explicó que la norma mencionada asegura que los bosques sean manejados de manera sostenible, con los mecanismos de salvaguarda y seguimiento necesarios, y además también está asegurada la participación del Ministerio del Ambiente, el Ministerio de Agricultura y otros organismos en el ordenamiento del uso de los recursos y el control del uso dentro del bosque.

También manifestó que el texto legal recoge muchos aportes y da respuesta a las inquietudes de diversos actores del sector forestal y consideró que la Secretaría Técnica que encabezó ha cumplido con realizar un proceso participativo. “Hemos recibido más de 200 aportes de instituciones públicas y privadas, cientos de personas participaron en las reuniones y los aportes, y las matrices en las que se analizan las propuestas, han sido colgadas en la página web”, anotó.

Suárez de Freitas consideró que sería importante conocer cuáles son los puntos precisos que cuestionan las organizaciones, entre las que está el Colectivo Forestal, que no están de acuerdo con el texto final de la nueva Ley Forestal. “Yo no sé quiénes están agrupados en el Colectivo Forestal ni a quiénes representan directamente”, agregó.

“Les preocupa que no haya un Viceministerio Forestal, pues eso no debilita ni desmerece el marco institucional de esta ley. Sobre el cambio de uso de tierras se ha puesto lo que se acordó en la Mesa de Pueblos Indígenas, hasta se ha puesto en artículos diferentes y se hace la diferenciación entre bosques en tierras forestales y de protección, y bosques en tierras agrícolas”, indicó.

Consulta estaría a cargo del Congreso

De otro lado, señaló que el proceso de consulta previa de la nueva Ley Forestal debería ser convocado por el Congreso de la República, ya que este proceso debe ser realizado por la autoridad que aprueba la norma.

“Las consultas en general son buenas, porque llegar a un consenso amplio es bueno y necesario, pero en el tema político sobre si corresponde aplicar una ley que aún no ha sido aprobada, esa es una interpretación que debe darse en el Congreso”, anotó.