Una tonelada de clorhidrato de cocaína, cuyo destino era Sudáfrica, fue detectada y decomisada por la Policía en el terminal marítimo del Callao a pocos días del inicio de la Copa del Mundo.
Según se informó, el ilegal cargamento estaba bien camuflado en un lote grande de pañales que a su vez estaba dentro de un contenedor en el muelle sur del terminal marítimo a punto de ser embarcado y trasladado vía marítima al país africano, sede de la fiesta mundial de futbol.
El caso se maneja con total hermetismo y se espera en las próximas horas mayores detalles de este duro golpe al narcotráfico.