Mateo Salinas, presidente de la Cámara de Comercio de Madre de Dios, hizo un llamado a las autoridades y empresarios de dicha región para que se comprometan en impulsar la capacidad productiva a fin de alcanzar un nivel de autosuficiencia alimentaria.
El directivo gremial dijo que las recientes paralizaciones mineras desnudaron nuevamente la conocida debilidad de autoabastecimiento de alimentos de la región, pues Madre de Dios sigue dependiendo de otras zonas del Perú e incluso de una antigua vinculación comercial con el vecino Brasil.
Salinas advirtió que la economía brasileña ofrece un limitante en el intercambio comercial con el Perú, especialmente en alimentos, pues registra un costo de vida mayor que el peruano debido a un ingreso per cápita más alto.
“Necesitamos invocar la participación de nuestras autoridades en proyectos de desarrollo que vinculen las posibilidades de trabajo de la gente de Madre de Dios”, insistió.
También reconoció que la carretera interoceánica ha logrado la integración de esta zona con el resto del país y por tanto ofrece mejores oportunidades comerciales en los ámbitos forestal y agropecuario, principalmente.
Puso como ejemplo que mientras hay una demanda insatisfecha de maíz en Puerto Maldonado, en Tahuamanu, zona productora del grano, faltan condiciones y tecnologías modernas para el cultivo, cosecha, almacenamiento y transporte.
Esto se traduce en precios poco rentables para el campesino que no estimulan el crecimiento de la actividad.
El Estado tiene que seguir invirtiendo en infraestructura para que la gente pueda tener mejores condiciones de comercialización mientras la sociedad civil debe organizarse mejor para demandar mayor atención en estos problemas en un ambiente de diálogo, puntualizó el presidente de la Cámara de Comercio.