A fin de mes, el Estado entregará a unas tres mil personas, una acreditación oficial de “desplazados por la violencia terrorista de los años 80 y 90”, inaugurando así el Registro Nacional de Desplazados hasta el año 2000, con el que reconoce su compromiso de resarcirlos del daño que les ocasionó la violencia.
Víctor Torres, titular de la Dirección General de Desplazados y Cultura de Paz, sostuvo que esta es una segunda etapa luego de la de emergencia en que el Estado creó el Programa de Apoyo al Repoblamiento (PAR) para el retorno de los desplazados a sus tierras.
Cifras extraoficiales hablan de unas 600 mil personas que dejaron sus tierras y pertenencias durante las dos décadas de violencia, de las cuales, el 50% retornó a sus pueblos cuando Abimael Guzmán cayó preso mientras que el resto se asentó en las ciudades capitales de varios departamentos y en las periferias de Lima.
“De lo que se trata ahora es que el Estado reconozca su condición de desplazados y tengan acceso a los derechos que les corresponde por ley” concluyó.
Desplazamientos
En 1983 se produce el primer desplazamiento masivo desde Ayacucho y Huancavelica.
Entre 1987-1989 se lleva a cabo un segundo desplazamiento masivo, esta vez desde varios lugares hacia Lima.
Finalmente, entre 1990 y 1992 , el tercer desplazamiento masivo proviene desde la Selva central y el Alto Huallaga.