Ancikar Izurrieta Pinedo, una bebé de origen indígena de cuatro meses de edad y que fue abandonada por sus padres en el Hospital Regional de Pucallpa, murió el miércoles último a las 5 de la madrugada, luego de más de un mes de agonía.
La indicada bebé fue internada en la Unidad de Terapia Intensiva del hospital pucallpino, donde los desnaturalizados padres se desatendieron totalmente de ella y desaparecieron para siempre.
La directora del hospital, Esmeralda Gómez Álvarez ordenó que atendieran a la niña con medicamentos del Sistema Integral de Salud. Médicos, enfermeras y asistenta social estuvieron brindando atención a la neonatal hasta el día de su fallecimiento. El hecho ha causado la indignación de numerosos pacientes, que enterados del lamentable caso, exigieron sanción a los malos padres.