El analista Rubén Vargas destacó el análisis que hizo el diario El Comercio en su editorial de ayer domingo, en el que hace un enfoque atinado sobre el problema de la hoja de coca y del narcotráfico en el Perú. “Ha dicho las cosas tal como son, tal como están ocurriendo y ha trazado la línea para que los cocaleros ilegales se decidan por el estado de derecho o persistan en servir de tontos útiles al narcotráfico”, precisó.
Un segundo elemento positivo es que ha lanzado un reto al Estado y a las instituciones vinculadas a la lucha antidrogas, de tomar el tema frontalmente y no esquivar sus responsabilidades. En este sentido, “tiene que haber una reacción favorable de las instituciones dedicadas a la lucha antidrogas y considerar las recomendaciones que señala ese editorial”, opinó Vargas Céspedes.
Nuevo “Zar Antidrogas”
Sobre la desactivación de DEVIDA, Vargas dijo que siempre se debe pensar en fortalecer las instituciones en nuestro país. “El narcotráfico busca que las instituciones de un país se debiliten. Pero en el caso de DEVIDA habría que repensar si conviene más fortalecerla o tal vez, como dice El Comercio, pensar que ya llegó al final su ciclo de vida y buscar otro modelo de institución que haga frente a este delicado problema con mayor eficacia”, agregó.
“Estoy de acuerdo en que la institución que sea el ente rector en la lucha antidrogas deba tener una presencia más activa dirigiendo al resto de sectores para que converjan en la lucha contra las drogas. Eso es lo que le está faltando a DEVIDA, está como ausente, no hace las recomendaciones oportunas cuando el gobierno central necesita mostrar aspectos de la estrategia de lucha contra las drogas”, reflexionó el abogado.
Sobre el probable sucesor de Rómulo Pizarro al frente de la estrategia nacional antinarcóticos, Vargas Céspedes definió un perfil en concreto: “Un zar antidrogas debe tener un peso político específico, una trayectoria democrática y por supuesto una gran solvencia moral”, puntualizó.