Un nutrido grupo de familiares de víctimas de violaciones a los derechos humanos durante el gobierno de Fujimori, protagonizó esta tarde una bulliciosa manifestación frente al domicilio del ex presidente, exigiendo su inmediata extradición al Perú para que sea juzgado por las autoridades judiciales que lo reclaman para que responda por diez acusaciones de corrupción y dos de derechos humanos. Premunidos de pancartas, cartelones, globos, matracas y pitos, los familiares de las víctimas de las matanzas de Barrios Altos y de la Universidad La Cantuta, llegaron hasta el edificio de la calle Luz, a escasas cuadras de la embajada del Japón, a donde Fujimori se mudó desde enero de este año, y exigieron a viva voz su extradición al Perú. Gisela Ortiz, portavoz del grupo y hermana un estudiante víctima del caso La Cantuta, dijo que en los últimos días se entrevistaron con diferentes personalidades chilenas, entre ellos el juez de la Corte Suprema Orlando Álvarez, quien tiene a su cargo el juicio de extradición, a quien le expresaron su preocupación sobre la posible fuga de Fujimori o que pida asilo en la embajada.