En seis años, los delitos ecológicos crecieron en 154 % en nuestro país, mientras que en el Alto Huallaga los delitos ecológicos más comunes son la contaminación de ríos y suelos a causa de la producción de drogas y la contaminación por residuos sólidos, sostuvo el economista Dennis Pereyra. “Está claro que la producción de drogas es el delito más contaminante, por todos los insumos químicos que son arrojados a los ríos Monzón y Huallaga”, subrayó.
Durante una entrevista con INFOREGIÓN, precisó que los cuatro delitos ambientales están referidos a las malas prácticas con las que se contamina el aire, el agua, el suelo, y también aquellas con las que se perjudica la flora y fauna de nuestro país. “Muchos de estos delitos no son sancionados por las autoridades estatales, y la participación del gobierno nacional o los gobiernos regionales y locales es mínima”, agregó.
“Lo más preocupante es que a nivel nacional, en los últimos seis años, estos delitos ecológicos han aumentado en 154%. El 2003 se habían reportado 1337 delitos, mientras que el 2008 se presentaron 3390 denuncias por este tipo de casos”, manifestó.
El especialista señaló que el sector privado es el más reincidente en crímenes ecológicos y dijo que la sanción contra los empresarios que incurren en estos delitos debería ser mayor e implicar la reparación de la contaminación originada.
Indicó que otros contaminadores ambientales son los ciudadanos y por ello recomendó elaborar estrategias de conservación ambiental y acciones para sensibilizar a la población. “Pero no se debe dejar de lado la implementación de planes de reforestación y manejo de residuos sólidos”, aseveró.
“La sociedad civil y las autoridades deben estar alertas ante cualquier delito ecológico, no podemos permitir que se siga contaminando indiscriminadamente nuestra flora y fauna. Por ello, se deben implementar políticas locales, regionales y nacionales a favor del cuidado del medio ambiente”, anotó.