El secretario ejecutivo de la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos, Ronald Gamarra, aseguró que el indulto no es posible en la situación legal del ex presidente Alberto Fujimori, cuya condena de 25 años de prisión por delitos de lesa humanidad y secuestro agravado ha sido ratificada por la Primera Sala Penal Transitoria de la Corte Suprema de Justicia.
El ex procurador sostuvo que la mencionada sentencia convierte al ex mandatario peruano en “un reo rematado”.
“Un indulto es prácticamente imposible, pero si se llega a concretar sería algo nefasto e inaceptable porque iría contra los tratados internacionales y sentencias de la Corte Interamericana de Derechos Humanos”, enfatizó.
En otro momento, el también abogado de la parte civil en el proceso contra Fujimori Fujimori señaló que la ratificación de la sentencia es rotunda y definitiva y dijo que cualquier otra acción para pedir su nulidad es “un manotazo de ahogado”.
Respeto al debido proceso
“Si el abogado de Fujimori quiere llevar el caso a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, lo que se va a evaluar en esta instancia supranacional es si en el proceso penal se respetaron derechos y garantías básicas del acusado. Tengo la absoluta certeza de que el proceso resistirá todo el análisis del sistema interamericano de protección a los derechos humanos. Estoy seguro de que si el caso Fujimori va a la Corte, esa demanda será rechazada”, expresó.
Afirmó que el fallo que ratifica la pena de 25 años de cárcel demuestra que Fujimori es autor de un conjunto de delitos de lesa humanidad, y del secuestro agravado del empresario Samuel Dyer y del periodista Gustavo Gorriti.
“Este fallo es definitivo e inapelable. Ahora el abogado de la defensa, César Nakasaki, está en su derecho de buscar alguna salida legal, pero sabe bien como abogado que su defendido Fujimori es un reo rematado porque perdió la batalla legal ante el Poder Judicial. Eso que dice que planteará nulidad a la sentencia o un hábeas corpus y que además acudirá al Tribunal Constitucional y organismos internacionales son los típicos manotazos de ahogado. Ahora se debe ejecutar la sentencia “, insistió.
Finalmente, recordó que la edad del condenado no es una excusa para la impunidad, y dijo que así el acusado tenga una edad avanzada no se le puede perdonar delito alguno.
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