La Constitución Política y los tratados internacionales de Derechos Humanos firmados por el Estado peruano hacen imposible que se pueda aplicar la pena de muerte en el Perú, señaló hoy el ex procurador Ronald Gamarra.
Gamarra recordó que la Constitución de 1979 limitó la pena capital a casos de traición a la Patria en guerra externa, en tanto que la de 1993 modificó el artículo 140 ampliándolo para casos de traición a la Patria en caso de guerra y terrorismo de acuerdo a los tratados de los que Perú es parte.
El abogado recordó que la pena de muerte es un castigo que no disuade ni evita que continúen los delitos. «Más bien, es un castigo que atenta contra los derechos primarios de la persona”.