El apu Virgilio Pizarro, representante de 24 comunidades nativas ubicadas en el área de los valles de los ríos Apurímac y Ene, VRAE, no pudo ocultar su felicidad al recibir de manos del Organismo de Formalización de la Propiedad Informal, COFOPRI, el título de propiedad de la comunidad nativa de Tiñovancani, asentada en el distrito de Pichari, en la provincia cusqueña de La Convención.
«Es un sueño cumplido por el que hemos esperado más de diez años», expresó el líder indígena, al observar que los representantes de las comunidades de Comporioshiaco y Compilaposhiari también recibían los documentos que inscriben la propiedad de sus terrenos en los Registros Públicos.
El dirigente amazónico aseguró que las 24 comunidades asháninkas y matshiguengas que representa reconocen la seguridad jurídica que brinda el saneamiento físico legal en la protección de sus viviendas y cultivos.
«Esperábamos la titulación con mucha esperanza porque siempre hemos recibido amenazas de los colonos que vienen invadiendo nuestras tierras», manifestó.
En otro momento, el apu Pizarro exhortó a las comunidades nativas amazónicas a «gestionar y obtener su título de propiedad», a fin de evitar las invasiones. El dirigente agregó que el documento de propiedad les facilita la producción y la venta del cacao y del café.
Por su parte, el director ejecutivo de COFOPRI, Omar Quezada, resaltó la importancia de la participación de los programas sociales y la presencia del Estado en la zona del VRAE.
Durante dos intensos días, una delegación de funcionarios de COFOPRI, encabezados por Quezada, cumplió una intensa jornada de trabajo en el VRAE entregando un total de 5 mil 500 títulos de propiedad urbanos y rurales, en los distritos de Santa Rosa, San Francisco y Sivia en la región Ayacucho, así como en Kimbiri y Pichari en el Cusco.