El Centro de Información y Educación para la Prevención del Abuso de Drogas, CEDRO, celebró hoy 23 años de labor constante en una ceremonia a la que asistieron personalidades como la esposa del presidente y directora de la ONG Trabajo y Familia, Pilar Nores de García; el jefe de DEVIDA, Rómulo Pizarro; el representante de la ONUDD para Perú, Ecuador y Bolivia, Flavio Mirella; y otras destacadas personalidades.
Durante sus palabras de bienvenida, el presidente ejecutivo de CEDRO, Alejandro Vassilaqui, agradeció al gobierno por permitir a la institución trabajar y colaborar con el complejo problema de la lucha contra las drogas en nuestro país.
“A veces yo no se si llamarlo lucha, es un proceso de siempre, nunca se ganará pero jamás vamos a permitir que se pierda”, exclamó Vassilaqui.
En ese sentido, informó que pronto se iniciarán las labores de prevención en el valle del Monzón, lugar donde el 95 por ciento de los cultivos son de coca ilegal, a fin de mejorar la calidad de vida de la juventud de esa zona.
Del mismo modo, el director de CEDRO manifestó su preocupación por la situación del valle de los ríos Apurímac y Ene, VRAE.
“Tenemos una preocupación especial por lo que está sucediendo en el valle del río Apurímac y Ene donde se procesa potencialmente más de un 30 por ciento de la coca para la producción de drogas cocaínicas. Ese valle va a tener un futuro mejor que el del ser el centro de la producción de drogas en este país”, aseguró.
Mensaje de Ban Ki Moon
A su turno, el representante de la Oficina de las Naciones Unidas para las Drogas y el Delito, ONUDD, Flavio Mirella, dio a conocer el pronunciamiento del secretario general de la ONU con motivo del Día Mundial de Lucha contra las Drogas, que también se celebra hoy.
“El uso indebido de drogas se puede evitar, tratar y controlar. Insto a los estados miembros a que mejoren sus intervenciones preventivas e integren el tratamiento de la drogadicción en los programas de salud pública”, señala el texto leído ante la audiencia por Mirella
“Unamos esfuerzos para ayudar a las personas afectadas por la drogadicción y reducir el número de lugares peligrosos en el planeta que acogen la producción el tráfico y el consumo de drogas”, indica.
Estado debió preocuparse antes por el problema
Más adelante, el jefe de DEVIDA, Rómulo Pizarro, consideró que el problema de las drogas debió ser preocupación del Estado hace mucho tiempo, debido a ello resaltó con preocupación que la demanda mundial de drogas es de 17 millones de personas.
“Según información de las naciones unidas, el narcotráfico es el más global de los negocios que se inicia en un valle alejado y termina en salones de fiesta en discotecas o en las calles de una ciudad donde un joven de 10 ó 12 años compra una dosis de droga para que el narcotráfico se empodere”, refirió finalmente Pizarro Tomasio.