MADRE DE DIOS. “No queremos morir de hambre”. Esta es la llamada de auxilio que lanzó Luis Otsuka Salazar, gobernador regional de Madre de Dios, que dirige a la presidenta Dina Boluarte, tras 20 días de bloqueo de la vía Interoceánica. La región no solo se padece hambre por la falta de alimentos, sino que también su economía empieza a colapsar.
Unos cuatro hogares de niños y uno de adultos mayores no tenían alimentos ni gas para preparar sus alimentos. En el establecimiento penitenciario de Puerto Maldonado, los internos se quejan de comer solo pallares con arroz todos los días por la falta de víveres. El administrador del penal lo niega, pero no puede impedir que los casi 1000 internos se quejen a este medio a través de llamadas telefónicas.
Todos los grifos de la ciudad de Puerto Maldonado no tienen una gota de combustible y cientos de ciudadanos hacen largas colas con la esperanza de alcanzar un litro de gasolina. La ciudad que ya parece una ciudad fantasma tiene pocos vehículos que circulan las calles. El transporte es restringido de parte de los mototaxistas que elevan la tarifa de transporte de pasajeros de S/ 2 soles a S/ 6 y S/ 8. La gente que no puede pagar se moviliza a pie.
Además, en las tiendas y mercados no hay verduras y ni frutas provenientes de la sierra y de la costa. Un kilo de tomate llega a costar de S/ 20 a S/ 25, las zanahorias están a S/ 13 soles y el de papas a S/ 12. El ultimo balón de gas se llegó a vender a S/ 250; ahora no existe en las tiendas de comercialización.
En la cocina del hospital Santa Rosa de Puerto Maldonado ya no hay alimentos para hacer las dietas diarias de pacientes y trabajadores. De los 250 platos que servían a diario, ahora solo se preparan 100 raciones destinados únicamente a los pacientes. El personal médico y enfermero de guardia se queda sin comer.
“Tenemos un problema con la alimentación. Solo tenemos alimentos y gas para tres días”, alerta el director del local, Humberto Chaves Celis. No hay combustible para los vehículos, solo una ambulancia está operativa. Tampoco hay combustible para los generadores eléctricos. Si hubiera un apagón, los pacientes de la unidad de cuidados intensivos y de emergencia se querían sin atención. Esta mañana se dejaron las cocinas a gas y se empezó a cocinar con carbón y leña. “El problema no es presupuestal, si no es por motivo del bloqueo de la vía”, asegura Celis.
¿Quién financia el bloqueo de la vía?
La vía Interoceánica tiene 20 días de bloqueo desde el 4 de enero. A la fecha está bloqueada en la localidad de Loromayo y Santa Rosa, en el distrito de Inambari, por gente de proveniente de la región Puno y mineros ilegales. Lo mismo se da en la entrada a Laberinto por personas de la minería ilegal de La Pampa y de la ciudad Laberinto, en el distrito de Tambopata. En la ruta de Puerto Maldonado – Iñapari, en las localidades de Mavila e Iberia, la situación se da por los productores agrarios.
En Puerto Maldonado hay pocos manifestantes, pues estos concentraron sus esfuerzos en el bloqueo de la entrada a Laberinto, en el lugar denominado Santo Domingo, donde casi 200 personas -entre adultos, mujeres y niños- permanecen todo el día al pie de la carretera. En este punto no dejan pasar ningún vehículo que no sea de transporte de manifestantes que son traídos desde la frontera de Puno y de la zona de minería ilegal de La Pampa para apoyar las marchas en las calles.
Una fuente desde La Pampa revela que el presidente del Comité de Lucha, Brussi Elwis Apaza Vilcapaza, con apoyo de la seguridad de los mineros ilegales, solicita S/ 500 por cada motor de más cinco mil mineros que operan en La Pampa para financiar el bloqueo y las manifestaciones en la región Madre de Dios.
Otra fuente dice que a los camiones que trasladan gas, combustible, y alimentos, se les autoriza el paso de los bloqueos en Loromayo y Santa Rosa; pero se quedan en la zona de La Pampa y en Laberinto (localidades donde se comercializa el combustible, el gas y alimentos que deberían llegar a la ciudad Puerto Maldonado) para que la minería ilegal que financia las manifestaciones siga operando.
Se mantiene reforzado el bloqueo de la entrada de Laberinto hacia Puerto Maldonado y no se dejan pasar a camiones que trasladen combustible, gas ni alimentos “para matarlos de hambre con el bloqueo”. Así es la consigna de quienes hacen los bloqueos porque Puerto Maldonado no apoya sus manifestaciones, se escucha en un audio recogido por este medio de una conversación del grupo WhatsApp de los huelguistas.
La economía al borde del colapso
Unos 30 galpones que alcanza una producción de 100 000 pollos semanales y de unas 250 toneladas de carne blanca se quedaron sin alimentos para la crianza de las aves en este fin de semana. El sector avícola tiene galpones con ambientes climatizados y alimentación con sistemas automáticos. El sector es conducido por 19 productores de la asociación de productores avícolas de la región Madre de Dios, representando una inversión de US$ 7 millones, donde el Gobierno no ha invertido nada para su crecimiento y consolidación.
La producción de carne de pollo cubre el mercado de la región Madre de Dios y también se comercializa en las regiones Cusco, Puno y Apurimac. Es el sector industrial, que emplea a unas 3500 personas de manera directa e indirecta, el que ahora se encuentra al borde del colapso.
El sábado pasado, por tarde, unos 19 productores avícolas fueron a la casa del gobernador regional para solicitarle el desbloqueo de la vía para el paso de los vehículos que trasladan maíz amarillo duro, torta de soya, gas y combustibles. También se solicitó un puente aéreo para el traslado de los micronutrientes. Las pérdidas económicas para el sector superarían los cien mil dólares al mes, sin embargo, el funcionario regional no los atendió.
Similar situación se da con las piscigranjas en la producción de carne pescado: no tienen alimentos para los peces. La producción de papaya que se comercializaban en los mercados del sur (Cusco, Puno, Arequipa y Tacna) se pudre en las chacras a falta de transporte. El sector forestal, único en el país con un millón seiscientos mil hectáreas de bosques certificados, no puede cumplir con sus cuotas de exportación de madera dura. El sector turismo canceló sus reservas hasta abril y más de 500 trabajadores se quedan sin empleo. No hay cementos en las tiendas comerciales y el sector construcción está paralizado.
Sin salida
La gestión de traer alimentos, combustible y gas desde Brasil o Bolivia está restringida por la legislación peruana, dice el gobernador madrediosense. Por gestión del congresista Eduardo Salhuana en el vuelo de Latam del pasado domingo se trajeron 10 toneladas de verduras de la capital para venderlas en una feria solidaria a precio de costo, pero la cola para comprar estos alimentos es de cinco mil personas y la comida no alcanza.
La llegada de unas 12 toneladas de insumos para la potabilización del agua en el sábado pasado de parte del Ministerio de Vivienda ayuda a salvar a la ciudad de quedarse sin agua potable, pero el racionamiento del líquido elemento sigue por el temor a que el bloqueo se mantenga.
“Si esto continua así podría desbordarse en un problema más grave con consecuencias de mayor magnitud. Yo le digo a la presidente de la República y al premier que ‘esto se acabó’. Ellos tienen que resolver este gravísimo problema que tenemos soportando en Madre de Dios. Ya es momento de que ellos tienen que tomar una decisión; nosotros no podemos morir de hambre así”, finalizó Luis Otsuka.
La autoridad dijo esto enterado de que grupos de personas de la ciudad de Puerto Maldonado convocan a la ciudadanía a organizar una tercera “Marcha por la Paz” para desbloquear la vía Interoceánica, así como lo hicieron el pasado 11 de enero para desbloquear el puente Billinghurst, ello en vista que el Gobierno no ha podido desbloquear la vía.
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