El proyecto REDD+ Campo Verde se ubica en las cercanías a la ciudad de Pucallpa, en la región Ucayali. En la zona, estos bosques se encuentran amenazados por presiones de deforestación a causa de la agricultura, la tala ilegal, los incendios forestales, la urbanización (crecimiento poblacional sin planificación) y con fines ilegales otros agentes de riesgo en la zona.
Al respecto, la empresa BAM (Bosques Amazónicos) ha venido protegiendo estos espacios boscosos y su biodiversidad por más de una década utilizando recursos propios, pero su mayor aporte es haber sabido realizar bien su trabajo de relacionamiento y trabajo con las comunidades aledañas, enseñándoles su importante rol en la conservación del ambiente.
BAM es consciente que no habría éxito en la gestión de reforestar la Amazonía sin un buen equipo de comunicaciones que escuche las necesidades y trabaje con las comunidades aledañas a la zona de influencia. De hecho, ellas garantizan que el trabajo se realice de modo óptimo. Debido a su conocimiento del lugar son elegidas para dirigir medidas de conservación tales como el monitoreo y control de delitos ambientales, la dirección de puestos de vigilancia alrededor del área, el patrullaje en equipo de seguridad territorial, entre otras.
Al estar en una región de recursos limitados, las poblaciones vecinas tienen un inadecuado acceso a los servicios básicos y a la formalización de actividades productivas, insuficientes capacidades de gestión social, una marcada ausencia de buenas prácticas agrícolas y forestales sostenibles y poco conocimiento de tecnologías apropiadas. Por ello, BAM planifica reuniones, asambleas. Se comunica directamente con representantes usando otras herramientas de comunicación para informar, enseñar y culturizar.
Medios de comunicación locales difunden las buenas actividades de BAM en la zona a favor de comunidades y asentamientos humanos en su zona de influencia en la región Ucayali. Por ejemplo, construir una cancha deportiva para incentivar el deporte, 5 km. de carretera, reparar escuelas para que los niños tengan mejor educación, ofrecer servicio médico constante para que la gente sea consciente que tienen el derecho a recibir atención médica al igual que deben preocuparse por su salud.
Ellos confían en BAM y la empresa en ellos; es decir, en su capacidad para gestionar de forma sostenible el bosque para generar cadenas de valor en armonía con la integridad de la naturaleza y sus productos/servicios ecosistémicos.
En esta línea, la inclusión de las poblaciones y grupos de interés es fundamental para el desarrollo del proyecto y el cumplimiento de la protección forestal. Por ello, el proyecto involucra a las comunidades vecinas en su propuesta de valor para mejorar los medios de vida de la comunidad y asegurar el impacto de los esfuerzos a largo plazo.
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