«Instamos a los estados de las Américas presentes en la IX Cumbre de las Américas a que adopten compromisos políticos concretos, que incluyan las propuestas de la sociedad civil y pueblos indígenas, consientes de nuestro rol fundamental en la construcción de un futuro sostenible, resiliente y equitativo; y, den un paso del compromiso a la acción. Si continuamos ignorando la crisis multidimensional en la que nos encontramos, no habrá futuro».
Ese fue el llamado formulado por la Coordinadora de las Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (Coica) a las delegaciones y funcionarios que asisten a la cumbre mencionada que se desarrolla desde ayer en la ciudad de Los Angeles, en los Estados Unidos. El encuentro busca discutir sobre los retos que enfrente el continente, así como también es una ocasión para fortalecer al unidad hemisférica y la responsabilidad nacional y colectiva. Este evento tiene como tema “Construir un futuro sostenible, resiliente y equitativo”.
Coica precisó que «pese a que no existen espacios específicos de participación en dónde los pueblos indígenas puedan proponer acciones o ser parte de la toma de decisiones frente a las diferentes problemáticas de América, líderes y lideresas de nuestras bases de Coiab (Brasil) y Confeniae (Ecuador) se encuentran participando en reuniones de alto nivel, eventos paralelos y reunioes bilaterales, con el fin de elevar las voces como pueblos indígenas de la cuenca amazónica y demandar que las acciones que busca impulsar esta cumbre – cooperación hacia un crecimiento económico y una prosperidad inclusiva en toda la región, estén basadas en el respeto a nuestros territorios y la protección de la Amazonía, principal regulador climático».
Sobre las decisiones que se tomarán en la cumbre, Gregorio Mirabal, coordinador de la Coica, precisó: “Hacen convenios por el clima, por el mercado de carbono, reciben mucho dinero para supuestamente proteger la naturaleza de América Latina y realmente los que hacemos ese trabajo no somos tomados en cuenta. Gobernantes de los países, empresas, ministros, ¡no más promesas, conviertan eso en un plan de acción que nos involucre en las soluciones urgentes!».