La Libertad: Reabren investigación de fallecidos por minería ilegal en cerro El Toro

LA LIBERTAD. La Fiscalía Superior Mixta de Sánchez Carrión dispuso reabrir la investigación contra el principal minero informal, Jorge Espejo Moreno, por el delito de homicidio culposo por la muerte de cuatro personas al interior de un socavón ilegal, ubicado en su propiedad en el cerro El Toro, provincia de Sánchez Carrión, región La Libertad.

La medida se dispuso ante la deficiente investigación fiscal que denunció el consejero regional, Greco Quiroz. Como se recuerda, el fiscal adjunto de Huamachuco, Ronald Urrutia Castillo, archivó el caso al sustentar que no había motivos para acusar al minero Espejo Moreno, debido a que no hubo necropsias para determinar las causas de las muertes de las víctimas.

Según se informó, se investigará al dueño de Minerals Doña Julia por otros delitos durante los próximos ochos meses con el fin de recoger las evidencias orientadas a determinar la muerte de los tres hermanos Valderrama Altamirano y de Medardo Fernández Acevedo registradas el 6 de mayo de este año al interior de esta minera ilegal.

Cabe señalar que, a pesar de las sanciones emitidas por la Gerencia Regional de Energía, Minas e Hidrocarburos de La Libertad, la empresa Minerals Doña Julia de Jorge Espejo, recientemente excluida del Registro Integral de Formalización Minera (Reinfo), sigue operando.

Según versiones de trabajadores del lugar, la madrugada del domingo 12 de diciembre hubo un nuevo derrumbe donde habrían muerto varias personas al interior de un socavón. Una de ellas fue identificada como Luciano Monzón del caserío La Unión, cerca del centro poblado Marcochugo, Huamachuco.

En ese sentido, las autoridades comunales denunciaron que cuando hay muertes en el cerro El Toro, los involucrados supuestamente compran el silencio de los deudos y son amenazados. Por ello, se cree que habrían arreglado con los familiares para evitar declaraciones ante la prensa. Además, esa madrugada, tres sujetos habrían disparado contra cámaras de la empresa Summa Gold que monitorean la zona.

Fuente: La República