AYACUCHO. El Gobierno Regional de Ayacucho, junto a la Policía Nacional del Perú, el Cuerpo General de Bomberos, así como el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor) y Wildlife Conservation Society (WCS) lograron rescatar y liberar de un oso andino (Tremarctos ornatus) en los bosques húmedos del distrito de Uchuraccay, en la provincia ayacuchana de Huanta.
Esta medida se tomó luego de que La Dirección Forestal y de Fauna Silvestre (DRFFS) de Ayacucho reportara que en el centro poblado de Huaynacancha, un oso andino había trepado a la copa de un árbol de eucalipto para protegerse de los comuneros que vivían cerca, quienes atemorizados por su presencia lo habían capturado.
Serfor, con apoyo de WCS, envió un médico veterinario y un biólogo para apoyar el rescate del animal silvestre que llevaba tres días sin bajar del árbol. Después de evaluar y acondicionar el área para evitar que el oso salga herido con su captura, le lanzaron dardos sedantes. Además, bomberos y personal policial de Ayacucho provistos de arnés y cuerdas utilizaron el techo de una casa colindante al árbol para bajar al oso.
Antes que el oso despertara y fuera liberado en los bosques húmedos del Vraem, los especialistas del Serfor lo revisaron y confirmaron que era un oso macho juvenil de aproximadamente un año de edad y de unos 50 kilos de peso. Su estado de salud era favorable, a pesar de encontrarse agotado y delgado tras permanecer en el árbol.
Tras este acontecimiento, los pobladores de la zona tomaron conocimiento del rol que cumple este mamífero en los ecosistemas que habita y se comprometieron a conservar al oso andino y sus hábitats, además de comunicar y comprometer a sus paisanos en la tarea y lo necesario que resulta la convivencia armónica con esta especie.
El oso andino, oso frontino, oso de anteojos o ukumari, tiene una dieta vegetariana, y se considera el “arquitecto de los bosques”, debido a que al alimentarse y movilizarse dispersa las semillas de los frutos, con lo cual ayuda a la regeneración de sus bosques andinos.
Esta especie es protegida por el Estado peruano, categorizada como Vulnerable por la legislación nacional e incluida en el Apéndice I de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres-Cites. Además, cuenta con un Plan Nacional de Conservación, aprobado en el 2016, pues es la única especie de oso que habita en Sudamérica, informó Serfor a INFOREGIÓN.