MADRE DE DIOS. Tocaron la puerta tres veces y luego se escuchó decir “Venimos por el caso del Sr. Chino, somos la seguridad de la trocha”. Eran las 11:30 de la noche y los tres desconocidos que tocaban la puerta portaban armas de corto y largo alcance. Así lo conto a la policía especializada de la Divincri de Puerto Maldonado, Lucy Ofelia Nina Huamani, pareja de Benito Humeres Surco, un agricultor de la zona de “Alto Manuani”, al interior del kilómetro 116, de la zona de La Pampa. Humeres abrió la puerta a los desconocidos. Ellos lo encañonaron y se lo llevaron por un camino al interior de la parcela agrícola para conversar. Luego de 10 minutos se escuchó un disparo y todo quedo en silencio.
La mujer temió por su vida y esperó a que amaneciera para ir en busca de su pareja. A quinientos metros de la casa lo encontró tirado boca abajo en el suelo en un charco de sangre. Tenía una herida en el oído izquierdo por un proyectil de arma de fuego. Según el reporte de la comisaria de Santa Rosa, distrito de Inambari, el asesinato sucedió el 10 de febrero del 2020, en una parcela agrícola en el kilómetro 116 de la vía interoceánica, zona de La Pampa. Se sabe que un mes antes del asesinato, un minero de La Pampa, a quien solo se le conoce como “el Chino” ofreció en varias oportunidades comprar el terreno agrícola a Benito Humeres, pero este siempre se había negado.
La mañana del 9 de enero del 2020, José Abelardo Cañihua Nina (36), con DNI 47830284, ingresó a su parcela agrícola del kilómetro 113, en la zona de La Pampa. Estaba acompañado de su hermano, hijos y un amigo para su seguridad. Al interior de la parcela sorprendió a mineros trabajando con 15 motores. Cañihua les pidió “retirarse” pero los mineros les ofrecieron un pago de S/500 semanales por cada motor que operaba, a lo que Cañihua se negó. Luego de varios minutos de discusión, les insistió para que se retiren de su propiedad. Seguidamente, los amenazó si persistían en quedarse y que volvería con la Fiscalía y la policía ecológica para una interdicción contra la minería ilegal. Al salir de su parcela agrícola, 15 metros antes de llegar a la vía interoceánica, Cañihua y sus acompañantes fueron asaltados por tres personas. Tenían el rostro cubierto con pasamontañas. Estos encañonaron a Cañihua para llevárselo como rehén hasta un campamento rustico, donde lo asesinaron con tres tiros a la cabeza.
El 14 de diciembre del 2019, la policía encontró un cadáver NN en estado de descomposición dentro de una parcela agrícola, ubicado en el kilómetro 104 zona de La Pampa. Según el informe de Medicina legal de la Fiscalía de Puerto Maldonado, el cuerpo sin vida estaba tirado en el bosque con signos de haber sido torturado. La muerte se produjo por fractura de base de cráneo por objeto contundente. Tras un examen de huella dactilar, el cadáver fue identificado como Primitiva Gutiérrez del Castillo (46), con DNI 28305926. Era propietaria de una parcelera agrícola en la comunidad de Virgen de la Candelaria, kilómetro 104, en zona de La Pampa. La primera semana del mes de diciembre del 2019, sus hijas habían puesto la denuncia por su desaparición, en la comisaria de Santa Rosa.
Alvino Aedo Calderón, minero en proceso de formalización, fue asesinado el 15 de agosto del 2021 dentro de su campamento minero en la zona de Laberinto, y luego su cuerpo arrojado al rio Madre de Dios, amarrado a una bomba de metal. Aedo habría sido asesinado por negarse al pago de cupos para la seguridad, según las indagaciones de la policía.
El asesinato de Roberto Carlo Pacheco Villanueva, hijo del defensor ambiental Demetrio Pacheco Estaca, ocurrió el 10 de setiembre del 2020. Según la investigación policial, este habría sido encargado por Hilario Mamani Churata y Leónidas Crisologo Mujica Mayorga, (exsuboficial de la policía) quienes controlaban el ingreso del kilómetro 98 de la zona de La Pampa. El motivo era ampliar las actividades de minería ilegal en la concesión de reforestación de Demetrio Pacheco.
La Pampa: Tierra de nadie
Si hablan o ponen la denuncia “ellos matan a toda la familia”, dice Rafael Condo Huilca, presidente de la Federación Agraria de Madre de Dios. El dirigente de los agricultores asegura que estos asesinatos son en represalia porque los estos se niegan a alquilar o vender sus tierras para la minería ilegal. Condo asegura que “La Pampa ha vuelto a ser la tierra de nadie, donde la vida no vale nada”.
“Ellos (los mineros ilegales) quieren comprar la parcela u ofrecen pagar semanal por cada motor, que opere minería”, nos dice “Camila” una agricultora de la comunidad de Virgen de la Candelaria, del kilómetro 110. Su parcela fue invadida por los mineros ilegales, luego del operativo Mercurio 2019. Nos pide guardar su nombre en reserva para este reportaje, por temor a las represalias por los guardianes de la trocha.
El 10 de marzo del 2019 ella puso una denuncia por minería ilegal en el cuarto Despacho de la Fiscalía Corporativa Especializada en Materia Ambiental del Ministerio Publico de Puerto Maldonado. Tres días después, «Camila» recibió una llamada a su celular, donde le dijeron: “por qué mierda has puesto denuncia en la Fiscalía”. Quien la amenazó le describe qué ropa vestía cuando ella ingresó a la Fiscalía.
«Camila» no encontró resultados a sus denuncias durante el año 2019. Temiendo por su vida, en enero del 2020 viajó a Lima a presentar su denuncia a la Fiscal Flor de María Vega Zapata, coordinadora nacional de las Fiscalías en Materia Ambiental. Pero nos cuenta que no encontró apoyo, más bien reproches. “Como la parcela agrícola, está dentro del corredor minero”, le dijo la Fiscal Vega, “no era de su competencia”; y le mandó a la Fiscalía de Crimen Organizado para que investiguen las amenazas, que recibía de parte de la seguridad de los mineros ilegales.
El autor de la nota fue a constatar la situación de las estas parcelas agrícolas. Todo está deforestado. No hay bosque en pie, ni plantaciones agrícolas, salvo la presencia de la intensa minería ilegal que opera día y noche en la parcela de Benito Humeres, Abelardo Cañihua Nina, Primitiva Gutiérrez, y en la parcela de «Camila», al final nadie investigó, ni desalojó a nadie.
El «Venado» y los «Guardianes de la trocha»
Samuel Sánchez Irene (DNI 44584768), es conocido como el «Venado”. Este es el líder de los «Guardianes de la trocha». “Llevaba un fusil (FN F2000) colgado en su hombro, que solo usan los Infantes de la marina del Perú”, nos dice un testigo que lo visitó en el interior de La Pampa en octubre del 2017,para comprarle armas. El testigo dice conocer y tener amistad con el «Venado». Dice que procede del distrito de Campanilla, provincia de Mariscal Cáceres, región San Martin. Tiene 1.70 mts. de estatura y es flaco, de tés trigueña y usa jeans corto y polo desteñido; siempre lleva un casco con viseras y tiene un lunar en la frente. Entre el 2013 y el 2014, se dedicaba a la delincuencia común, asaltando a los mineros ilegales de La Pampa. Luego, con su banda, cambió su estrategia para darles protección de los delincuentes que llegaban de todas partes del país para operar en La Pampa. Así empezaron controlando una trocha de ingreso hasta el campamento minero mega 14 para luego controlar todos los ingresos de La Pampa, desde el kilómetro 98, hasta el 113, en el 2016.
Nuestro testigo revela que el «Venado» es el responsable de la muerte y la incineración de los cuerpos de más de 20 personas, entre noviembre del 2016 y febrero del 2017. La seguridad de los mineros de La Pampa son los “Guardianes de la trocha”: la temible organización paramilitar que asesinó e incineró los cuerpos de “delincuentes comunes” en lugares al que le llamaban “el quemadero”, dentro de La Pampa. Un siniestro lugar donde se asesinaba y se incineraba el cuerpo de las víctimas para desaparecerlos, en una fogata de leña. Esta versión fue publicada por El Comercio el 27 de febrero del 2017.
Entre el 2016 y el 2018 los «Guardianes de la trocha» era una especie de ejército paramilitar de aproximadamente unos 30 miembros con armas de corto y largo alcance: revólveres, fusiles y ametralladoras Mini Uzis. Ellos controlaban y daban seguridad a todos los campamentos mineros, al comercio que sirve a la minería, a bares y a cantinas a cambio del pago de cupos por la seguridad. Inicialmente vestían ropas de camuflaje y usaban pasamontañas. Luego, para mimetizarse con los mineros, vestían ropas de trabajo, dice nuestro testigo de La Pampa.
A la caza del «Venado»
El 25 de febrero del 2017 en un operativo policial cayeron cuatro integrantes de los «Guardianes de la trocha». Esto fue en un enfrentamiento a tiros en el lugar denominado “Mega 11”, zona de La Pampa. Tres de los integrantes de la banda lograron escapar. Entre ellos estaba el «Venado». Este último huyó tirándose a una poza de minería, cruzándola a nado, para perderse en el bosque, mientras que los efectivos policiales lo perseguían a tiros. Los capturados Palmer Rosell Cabrera León (23) Wilfredo Ccoylluri Diaz (33) David Lazo Santoyo (23) y Omar Quillis Rodríguez (34) fueron procesados por pertenecer a la banda criminal citada acusados por secuestro, tenencia ilegal de armas y sicariato por el caso del quemadero, el asesinato y la incineración de personas. El 6 de setiembre del 2019, el Juzgado penal colegiado de la Corte superior de justicia de Madre de Dios los condenó a cadena perpetua. Sin embargo, Samuel Sánchez Irene no aparece en esta investigación. Solo se le menciona como el líder de la banda, con el apelativo del “Venado” y/o “Yordan” y “el solitario”.
Desde marzo del 2017 se instala en la región Madre de Dios un grupo especial de la División de investigación de alta complejidad de la Policia – Doviac, al mando del Com PNP Antonio García Jcuro. Su única misión era la capturar al «Venado». En el 2017, tras operaciones de inteligencia, se infiltra en la organización e identifica a los «Guardianes de la trocha», conociéndose todos sus movimientos, operaciones y conexiones con las autoridades judiciales y militares, hechos que se registran en un informe de inteligencia. El 30 octubre 2017, se organiza un operativo para la captura del «Venado», con conocimiento del alto mando policial. Un grupo de 15 valerosos efectivos, con armas de largo y corto alcance, chalecos antibalas y un franco tirador tienen la tarea. El objetivo era atraparlo vivo o muerto. En el grupo estaba el colaborador de El Comercio. Se ingresa a la medianoche a la zona de Balata, para esperarlo en un punto donde a las 5 am. se sabía que pasaría el «Venado» para recoger los cupos de los mineros. Pero este nunca pasó. El operativo fracasó, el testigo de La Pampa, confió al El comercio, que se había filtrado información del operativo.
En 18 de julio del 2018, el grupo TERNA de la policía logró detener al «Venado», cuando este salía del aeropuerto José Aldamiz de la ciudad Puerto Maldonado. Esta vez, fue identificado con su DNI 44584768 con el nombre de Samuel Sánchez Irene, siendo fotografiado de frente y de perfil. Se corroboró que tenía un lunar en la frente, pero que ya se lo había sacado. El grupo TERNA entregó en ese día el «Venado» al Com. PNP, Manuel Morillo Crivilleros, Jefe de la Divincri de Puerto Maldonado. Sin embargo, este lo liberó “al no encontrar ninguna investigación ni requisitoria a la fecha”, aseguró.
Meses antes del desalojo de los mineros ilegales de La Pampa por el operativo Mercurio 2019, Samuel Sánchez Irene, decide vender el negocio de la seguridad, por S/400 000 a sus lugartenientes (a) “Rodrigo” Manuel Edy Tocto Roman, (a) “Tony” Iván Fernández Pérez. Es así que el «Venado» regresa a Campanilla, su ciudad natal. Un reporte de la comisaria de dicha localidad registró que fue detenido el 19 de setiembre del 2020 por la posesión ilegal de armas, sin embargo, luego habría sido liberado.
«Tony» y «Rodrigo», los nuevos «Guardianes de la trocha»
Iván Fernández Pérez (a) «Tony», Manuel Edy Tocto Roman (a) «Rodrigo» son los nuevos «Guardianes de la trocha». Ellos se dividen La Pampa para continuar con el negocio de la seguridad de los mineros ilegales. “Rodrigo” controla y da seguridad a los mineros ilegales que trabajan ahora en la margen derecha de La Pampa. Este grupo es de 30 personas. Entre los lugartenientes de “Rodrigo” está “El Gato, “Ovejas” y “Carlitos”. Ellos controlan las trochas y todas las tranqueras de ingreso a lugares donde trabajan minería, en el sector nueva Arequipa Sarayacu, Virgen de la Candelaria y el Alto Manuhuani. “Ovejas” es el sicario, quien ejecuta todas las muertes por encargo y asesinatos. Dicen que este es un tipo frio y asesino. «Carlitos» es la mano derecha de «Rodrigo», quien toma las decisiones cuando no está este sujeto, nos cuentan los agricultores de La Pampa.
“El Tony” y sus lugartenientes “Brahiam” y el “Rafa” controlan y dan seguridad a los comercios, bares y prostibares asentados al borde de la vía interoceanica, que han vuelto a instalarse luego del operativo 2019, en las poblaciones de Nueva Arequipa, Virgen de la Candelaria del kilómetro del 104 y hasta el 113. Este grupo integra unas 20 personas, dice el testigo, en La Pampa.
Los «Guardianes de la trocha», según fuentes policiales, se han expandido desde La Pampa hasta el corredor minero en nuevos enclaves mineros. Ellos controlan el ingreso al Puerto de Huantupac en el rio Madre de Dios, altura del kilómetro 47 de la vía interoceánica; otros, el ingreso del kilómetro 78 a Boca Guacamayo, kilómetro del 55 a Boca Colorado. Otros están en Delta uno y a la entrada a la comunidad nativa de San José del Karene y Puerto Luz. También se registra el ingreso al distrito de Camanti – Quincemil, provincia de Quispicanchis, región Cusco.
Ahora los nuevos cupos impuestas por los «Guardianes de la trocha», son de S/500 mensuales por cada maquinaria pesada (retroescabadora, cargador frontal), S/300 por cada motor de balsa, S/300 por cada negocio, taller, restauran, bar o prostíbulo. Estos acuerdos se toman en asamblea o son impuestos con la presencia de «Tony» y su grupo armado. Así se ve en un registro de video vigilancia del bar “Tu refugio” de la zona de Boca Guacamayo, del 2 de enero del 2020. Los «Guardianes de la trocha» ingresan portando armas de largo alcance (FAL y/o GALIL) obligando a los presentes a tirarse al piso. Aquí en el video se escucha decir al «Tony»: “la violencia y la delincuencia es problema, y nosotros estamos aquí, para poner orden”.
«Tony» es Iván Fernández Pérez, identificado con DNI 43854620, en un proceso del Juzgado penal de investigación preparatoria de Mazuko. Según el expediente, el día 15 de diciembre del 2018, a eso de las 9 pm. el suboficial PNP Diego Quispe Chunga es detenido por los «Guardianes de la trocha» cuando este cobraba cupos por mil soles a cada bar y cantina de La Pampa. “Rafa” Rafael Hidalgo Chávez, y «Tony» intervienen al efectivo policial.
Lo golpean, le quitan su arma y el dinero que había cobrado y le interrogan. El suboficial en su defensa revela que fue enviado por el Com. Manuel Morillo Cribilleros, que en ese momento era jefe de la Divincri de Puerto Maldonado. El interrogatorio es grabado por la cámara de celular de Rafael Hidalgo Chaves. Finalmente, dejan libre al suboficial Quispe Chunga, devolviéndole su arma, y el dinero que había recaudado.
Rafael Hidalgo Chávez, (a) “Rafa” intentaría recuperar el dinero de los cupos recogidos por Quispe Chunga, amenazando con difundir el video del suboficial. Esto queda registrado en una comunicación por el whatssap, con el Jefe de la región policial de Madre de Dios, pero este no le respondió. Luego “Rafa” entrega el video al periodista radial, Julio Blanco Rocca, y este difunde el video del interrogatorio a Quispe Chunga, en su medio radial y su red social facebook. El hecho del cobro de cupos de parte de la policía a los bares y cantinas de La Pampa para no ser intervenirlos es de conocimiento público. Días después, «Tony» envía a “Rafa” hacia Puerto Maldonado para comprar armas. En esta tarea, “Rafa” es asesinado a tiros y su cuerpo arrojado en una calle del centro poblado de la Joya.
El periodista Julio Blanco entregó el video a la Fiscalía Provincial Especializada Anticorrupción. El fiscal Sandro Chacon Yanqui denuncio al suboficial Diego Quispe Chunga y al Com. Manuel Morillo Cribilleros por la comisión del delito contra la administración pública, delitos cometidos por funcionarios públicos en la modalidad de concusión. En este proceso fue sentenciado el suboficial Diego Quispe Chunga a cinco años de pena efectiva.
El regreso del «Venado»
Manuel Edy Tocto Roman (a) Rodrigo fue asesinado en La Pampa el 4 de octubre del 2020 por la gente del «Venado». A Campanilla llegaron las quejas de los mineros de La Pampa sobre los abusos que cometían «Rodrigo» y «Tony.» “No solo habían elevado el cobro de cupos, sino que también ponía sus motores para operar minería, en el mejor lugar de producción de oro, y nadie los podía impedir”, nos dice nuestra informante en La Pampa.
El 31 de diciembre del 2020, en la noche, seis integrantes de la seguridad de «Rodrigo» son acribillados a balazos dentro de un campamento, en la trocha carrozable hacia Puerto Trujillo, centro poblado de Santa Rosa. Tras el levantamiento de los cadáveres la policía solo encuentra a cuatro de ellos. El 1 de enero, al interior de un inmueble del sector de Virgen de la Candelaria, son asesinados los hermanos, Yonatan Lancho Ramos y Jhon Elvis Lancho Ramos, ellos pertenecían al grupo de «Tony». El «Venado», líder de los «Guardianes de la trocha», había vuelto para proteger a los mineros ilegales de La Pampa. Nuestra fuente policial dice que este enfrentamiento entre la gente del «Venado» por recuperar y volver a controlar La Pampa, pueden haber muerto 30 personas, entre octubre del 2020 y junio del 2021.
Audios correspondientes a la investigación de Manuel Calloquispe entre 2017-2020.
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