El delfín rosado no lleva en el Perú una «vida en rosa»

Es delfín rosado es tan inteligente, que tiene una capacidad cerebral 40% mayor a la de los seres humanos. Esta criatura es amistosa, social y curiosa por naturaleza. Es la más inteligente de todas las especies de delfines de río. También es conocido como Boto, Tonina o delfín del Amazonas, debido a que vive en el río del mismo nombre, aunque también habita en las cuencas del Orinoco y la parte alta del Río Madeira en Bolivia. Es el más popular de las cinco especies de delfines que habitan en los ríos debido a su inusual color, además de ser la especie más grande.

Ejemplares juveniles que aún no han alcanzado el color rosado que tendrán en su adultez

Sobre el hecho de que su piel sea rosada, es desconocida la razón. Se alega que podría ser una adaptación a la vida en el río, la temperatura o por la presencia de capilares cerca de la superficie de la piel. Aunque, la teoría más acertada es que la coloración rosada la adquieren con el tiempo. Al nacer y en su etapa de juventud son grises, en la adolescencia gris claro y en la adultez se tornan rosados como consecuencia del desgaste de su piel. También, se dice que la mayoría de las hembras son grises y los machos son rosados debido a las cicatrices.

Tienen hocico largo con más de 100 dientes, son de frente prominente, ojos muy pequeños y a diferencia de los delfines de mar, su aleta dorsal es más alargada y plana. Respiran cada 30 a 110 segundos y son capaces de lanzar amplios chorros de agua por su orificio en la parte dorsal. Se sabe que sus vertebras cervicales no se encuentran fundidas por lo que les permite mover la cabeza hasta 180 grados, siendo una ventaja para cazar en aguas poco profundas y en las llanuras inundadas.

Este delfín puede llegar a medir hasta 2.50 m de largo y pesar alrededor de 250 kg, cuando están totalmente desarrollados. Respiran cada 30 a 110 segundos y lanzan un chorro de agua de hasta 2 metros de altura por el orificio dorsal. La mayor parte del tiempo ellos se mantienen nadando mirando hacía el fondo en busca de alimento, estos pueden viajar hasta 30 km al día. Se alimentan de 43 especies de peces diferentes, entre ellos se encuentran: el pez gato, pirañas, corvinas y tetras. También, consumen cangrejos y tortugas pequeñas.

En el año 2019, el delfín del río Amazonas (Inia geoffrensis), conocido como delfín rosado, entró en la categoría de especies En Peligro, solo un peldaño por debajo del riesgo de extinción, según la clasificación de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). Previamente, por varios años, este delfín permaneció en la categoría de “Vulnerable”.

Amenazas

Se sabe que los delfines rosados conforman la mayor población de delfines de río que existe porque las otras cuatro especies -en el Ganges (India), el Indo (Pakistán), el Yangtse (China) y en el Río de la Plata (entre Argentina y Uruguay)- están extintas o también peligra su supervivencia. De acuerdo a la IUCN, las amenazas que enfrenta el delfín rosado incluyen la captura incidental en la pesca, la matanza de los especímenes para ser usados como cebo para algunos peces. También los atrapan accidentalmente en sus redes de enmalle. Estos animales son afectados por la construcción de represas en los ríos y la contaminación ambiental por químicos y metales pesados.

Es penoso ver como muchos de estos animales únicos en el mundo sucumben bajo amenazas crecientes

Un motivo para su caza por parte de la población nativa es debido a la persistencia del mito de que por las noches este hermoso animal se convierte en un apuesto joven que seduce a las mujeres, motivo por el que también es cazado para toda clase de remedios de curanderos contra la infertilidad.

La destrucción acelerada de la cuenca del Amazonas los ha puesto en peligro en varias ocasiones, al igual que la imparable pesca y la tala de arboles. Además, el tráfico del río es otro gran problema, ya que al ser entes curiosos se acercan a los barcos donde son afectados por las hélices. Por otra parte el ruido producido por motores, máquinas y contaminación acústica, resulta desconcertante para los sistemas de navegación de los delfines rosados, causándoles la muerte.

La presencia de mercurio en delfines y otras especies es un mal que los diezma. Al respecto, hace algunos años se hizo una investigación en las cuencas del Amazonas y del Orinoco, en cuatro países: Colombia, Perú, Bolivia y Brasil. Se demostró que, de los 60 animales analizados, el 39 % tenía niveles de mercurio por encima de los valores establecidos por la Organización Mundial de la Salud. Aquí se consideraron los estándares máximos para las personas, pues no existen referencias para animales.

Ciertamente, hablamos de un animal hermoso, que no merece ser destruido lentamente bajo la acción humana

Iniciativas para su conservación

  • -El Ministerio de la Producción (Produce) aprobó en el 2018 el Plan de Acción Nacional para la Conservación de Delfines de Río (Inia geoffrensis y Sotalia fluviatilis) y el Manatí Amazónico (Trichechus inunguis) en el Perú: PAN Delfines de Río y Manatí Amazónico-Perú. El Ministerio de la Producción, a través del Despacho Viceministerial de Pesca y Acuicultura y las Direcciones Generales de Asuntos Ambientales Pesqueros y Acuícolas, y de Políticas y Análisis Regulatorio en Pesca y Acuicultura, son las responsables de su implementación.
  • En el 2018, WWF y Fundación Omacha, en colaboración con otras 50 organizaciones, crearon la iniciativa global South American River Dolphins, que incluye a organizaciones ambientales, universidades y organismos gubernamentales. Mediante esta iniciativa se está promoviendo proyectos de monitoreo satelital de delfines para conocer con mayor profundidad las amenazas de la especie y los sitios estratégicos para conservarla.

 

Fuente: Mongabay Latam, Andina, National Geographic, Actualidad Ambiental, EFE Verde, Agendadelmar.com.

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