SAN MARTÍN. Quinto Innuma, vicepresidente de la comunidad Santa Rosillo de Yanayaku, fue golpeado y amenazado por personas vinculadas a actividades ilegales en Huimbayoc, San Martín.
Como reportó Mongabay Latam, los hechos se produjeron tras una inspección de la Fiscalía Provincial Especializada en Delitos de Tráfico Ilícito de Drogas en la comunidad.
Las crecientes amenazas del narcotráfico y la tala ilegal vienen cercando a los pobladores indígenas de la comunidad nativa de Santa Rosillo de Yanayaku, donde se vienen registrando constantes agresiones a dirigentes.
Ataques e intimidaciones
Tras una inspección fiscal a Santa Rosillo de Yanayaku, en Tarapoto, el vicepresidente de la comunidad fue agredido físicamente y amenazado por personas vinculadas a actividades ilegales.
Los golpes que recibió Quinto Innuma le ocasionaron lesiones en el cuerpo, la cabeza y el rostro. No obstante, el atentando contra su integridad física no lo detiene.
“Todo esto está pasando porque decidimos no aceptar que quienes destruyen el bosque sigan haciéndolo, esto se tiene que saber”, señaló Quinto Innuma a Mongabay Latam.
Aunque el vicepresidente de la comunidad ya cuenta con garantías personales, estas medidas no llegan a protegerlo efectivamente, como lo pudo evidenciar el último ataque. Ahora se espera asistencia policial en la zona.
Hallazgos en diligencia
El hecho se produjo luego de que, el 16 de julio, se realizara la primera diligencia para inspeccionar el avance de la tala ilegal y de los cultivos ilícitos de coca en la comunidad.
La inspección fue realizada por la fiscal Ana Lozano Montenegro, con el acompañamiento del apu de la comunidad, Manuel Innuma, y su hermano Quinto Innuma, vicepresidente de la misma.
Como señalaron los pobladores a Mongabay, en las diligencias se verificó una pista de aterrizaje clandestina y se tomaron fotografías de las extensas zonas deforestadas en la comunidad nativa Santa Rosillo de Yanayaku.
Otros intereses
Pese a las denuncias, la situación en Santa Rosilla de Yanayaku es compleja, debido a que dentro de la comunidad hay personas que están relacionadas con las actividades ilegales.
Constantes agresiones
La comunidad arrastra estos problemas por años. Como han denunciado las autoridades de Santa Rosilla de Yanayaku, desde el 2017 se vienen registrando invasiones de madereros al lugar.
El 2018, comenzaron las amenazas a los dirigentes. Mientras la zona venía siendo afectada por la tala indiscriminada, los cultivos ilícitos de hoja de coca comenzaron a expandirse.
Ese mismo año, el apu Manuel Innuma también fue agredido y amenazado por personas vinculadas a madereros que invadían el territorio de la comunidad. Desde esa fecha, los dirigentes pidieron garantías para sus vidas.
Enfrentando la situación, el 2019, los dirigentes de la comunidad interpusieron una denuncia a la fiscalía de tráfico de drogas, con el apoyo de la Federación de Pueblos Indígenas Kechua Chazuta Amazonas (Fepikecha).
No obstante, no tuvieron apoyo inmediato. Como denunciaron dirigentes kichwas, hubo un lento accionar de la fiscalía bajo el argumento de falta de recursos para diligencias de inspección.
Luego de una prolongada espera, recién el último 16 de julio pudo realizarse la primera visita de la fiscalía a la comunidad y, tras ella, se volvieron a registrar agresiones e intimidaciones a los dirigentes.
Fuente: Servindi