PASCO. Debido a su belleza paisajística y porque resguarda una importante muestra de flora y fauna, así como reservorios naturales de agua, el Bosque Sho’llet es uno de los atractivos con mayor potencial turístico de la provincia de Oxapampa, región Pasco.
Este lugar abarca parte de los distritos de Villa Rica y Oxapampa, y se extiende en un espacio de 8995 hectáreas. Dentro de este bosque se pueden hallar nacientes de agua que proveen de dicho recurso a más de 13 mil personas y, además, es el hábitat de especies emblemáticas como el oso de anteojos y el gallito de las rocas. Sin embargo, pese a estas características, se encuentra amenazado.
Hace poco, el comité Salvemos Sho’llet, un grupo conformado por representantes de los municipios de Oxapampa y Villa Rica, y de la sociedad civil, denunció una vez más que, desde el 2014 al 2021, existen diversos procesos de titulación irregulares dentro del área a través del Gobierno Regional de Pasco. De otorgarse estos títulos, el bosque perdería hasta 5 mil hectáreas.
Según el comité, este hecho motivó que la Comisión de Fiscalización y Contraloría del Congreso, citara semanas atrás al Gobernador Regional de la Región Pasco, Pedro Ubaldo Polinar, con el fin de aclarar esta situación que compromete a gran parte del mencionado bosque.
En dicha reunión virtual, el parlamentario por la región Pasco, Marco Verde Heidinger, denunció la concesión de hasta 56 predios (titulados, inmatriculados y saneados) en el área del bosque, algunos de ellos entregados a personas que en algunos casos desconocen de la propiedad. Ante esta situación pidieron aclaraciones al Gobierno Regional de Pasco, sobre todo a la Dirección Regional de Agricultura, responsable del saneamiento físico legal de estos espacios.
El congresista Verde instó además al gobernador regional a solicitar la reversión de los predios dentro del área del Bosque Sho’llet que aún a la fecha están inmatriculados a nombre de la Dirección Regional de Pasco, con el fin de salvaguardar parte del área afectada.
Valores del bosque
Sho’llet, según la lengua yánesha, significa reina de los caracoles de colores. Anteriormente la zona se llamaba ‘El Pajonal’. Este lugar resalta por su densa vegetación y humedad. Es refugio además de diversas especies forestales, orquídeas y bromelias.
Según una leyenda yánesha, Sho’llet era una princesa que sufrió la pérdida de su amado y con su llanto llenó las pequeñas lagunas llamadas ‘Lágrimas de Sho’llet’, para poder contemplar su dolor en ellas.
Este espacio conserva especies emblemáticas de flora como nogal, ulcumano, diablo fuerte, helechos arbóreos, palmeras, ornamentales, medicinales. En fauna destacan, además el oso de anteojos y el gallito de las rocas, la sacha cabra, el venado, el mono choro y diversas aves.
Asimismo, alberga varios endemismos y es una zona de tránsito para diversas especies. Asimismo, protege las cabeceras de múltiples microcuencas como Chacos, Carapacho, Santa Cruz, Tigre, Quebrada Honda, Ñagazú, Canal de Piedra y Oyón, que proveen de agua para consumo humano y actividades productivas para los distritos de Oxapampa y Villa Rica.
Bosque sin protección legal
En el 2015, Actualidad Ambiental conversó con Elqui Roncal, entonces representante de la Mancomunidad de los Distritos de Oxapampa. El especialista explicó que parte de la causa de las invasiones que sufría el bosque se debía a que este espacio no estaba saneado legal ni físicamente, y por ello algunos aprovechaban esta “debilidad”.
El Bosque Sho’llet fue instituido como área de conservación municipal en el 2004 y 2006 por los municipios de Villa Rica y Oxapampa, respectivamente, sin embargo esa figura de conservación ya no está incluida dentro del sistema de áreas protegidas desde el 2007, tal como lo explica César Laura, especialista en Gobernanza del Instituto del Bien Común (IBC).
“A partir de 2007, todo lo que se había avanzado quedó prácticamente en el aire, ya no hubo un respaldo legal. A eso hay que agregarle que los que promovimos esa figura creímos que con la ordenanza [que creaba el área de conservación municipal] era suficiente. Creíamos que con ello se iba a respetar esta zona pero eso no pasó”, señala el especialista.
César Laura también destaca que en ese entonces no había mucha experiencia en el tema de gestión de áreas de conservación en los gobiernos locales y por ello el proceso de protección no era prioridad. Asimismo, explica que, a partir del 2013, el gobierno regional comenzó con los procesos de titulación sin realizar un adecuado diagnóstico que hubiese identificado que la zona ya estaba de alguna manera separada para convertirse en un área de conservación.
¿Por qué el proceso de titulaciones avanzaba y no el saneamiento del Bosque Sho’llet? El especialista del IBC destaca que en aquella época no existían acuerdos entre ambos municipios, no había acercamiento, había celos políticos y hasta problemas limítrofes. A ello se sumaba la desconfianza y distanciamiento con el propio gobierno regional y por ello quedó descartado, en ese entonces, la alternativa de convertir a la zona en un área de conservación regional.
Alternativas de solución
César Laura destaca que si bien algunos han logrado titular algunas zonas, los ahora dueños no ingresan a los predios porque las comunidades aledañas rechazan estas presuntas titulaciones irregulares. Si el proceso continúa, esto podría desencadenar un conflicto social que se desea evitar.
Por ello, el especialista comenta que como Salvemos Sho’llet han planteado algunas alternativas de solución al problema que tiene varias aristas. Uno de ellos está relacionado a la superposición que existe entre la extensión del bosque con el proyecto de extensión de la Comunidad Alto Purús y con los terrenos que tiene previsto titular el gobierno regional. En este caso, el comité y los mismos municipios plantean que esta zona se conceda a la comunidad.
Otra propuesta, que trabajan en el Plan Maestro, es elevar el número de guardabosques para este lugar. Por ahora, la zona solo es protegida por un administrador y un especialista que hace la labor de guardabosque. La idea es tener como mínimo tres guardabosques. Asimismo, se tiene previsto trabajar con las comunidades aledañas para formar comités voluntarios de vigilancia.
César Laura también comenta que existe la posibilidad de anexar el bosque con el Parque Nacional Yanachaga Chemillén, sin embargo solo se podría anexar una parte, ya que una porción importante se encuentra en conflicto. Asimismo, menciona que también existe la opción de convertir la zona en un área de conservación regional, pero consideran que el proceso puede durar varios años y eso puede desanimar a muchos.
Mientras se evalúe el mejor futuro para el Bosque Sho’llet, se espera un pronunciamiento claro de parte del Gobierno Regional de Pasco. La protección de este espacio importante para nuestra biodiversidad requiere de acciones urgentes.
Fuente: Actualidad Ambiental