El presidente Alan García presidió la ceremonia de incorporación de la fragata misilera BAP Quiñones, cuarta unidad clase Lupo adquirida por el gobierno peruano para potenciar su poder naval. En la ceremonia, el mandatario pidió al comando de la Armada aplicar medidas para recuperar la operatividad del Servicio Industrial de la Marina (SIMA) a fin de poner sus capacidades a disposición del desarrollo del país.
García Pérez indicó que se necesitan lanchas rápidas para la vigilancia de los ríos de la amazonía debido a la presencia de grupos subversivos que operan en países vecinos, los cuales ponen en riesgo la seguridad nacional al ingresar a nuestro territorio. Subrayó que el SIMA es necesario, porque el país está a las puertas de empezar a construir un puerto extraordinario que podría ser considerado como el más importante de América Latina.
También pidió no olvidar la memoria de los miembros de las Fuerzas Armadas que ofrendaron su vida por la patria a lo largo de toda nuestra historia, y demandó a los alcaldes recordar a los caídos durante la guerra contra el terrorismo bautizando algunas calles con sus nombres.