Cada año se vierten 100 millones de toneladas de plásticos a la naturaleza

Cada año se vierten a la naturaleza 100 millones de toneladas de residuos de plástico y la décima parte va a parar al mar. El plástico está ahogando el planeta y es una de las principales amenazas para la salud, el medio ambiente y las economías del mundo. Millones de tortugas aves y mamíferos marinos mueren ahogados, atrapados en las trampas de plástico que encuentran en los mares o por ingestión de fragmentos de plástico, muchos de los cuales terminan en nuestros platos poniendo también en riesgo nuestra salud.

¡Recoge el guante!

La actual crisis de la COVID-19 no solo está teniendo un impacto global en la salud de millones de personas; si no actuamos a tiempo y con responsabilidad, podríamos aumentar el ya grave problema de la contaminación por plásticos en la naturaleza. El uso masivo de guantes y mascarillas que ayudan a protegernos de posibles contagios puede convertirse en el nuevo enemigo de nuestros mares y océanos si no hacemos un uso responsable.

Asimismo, la crisis de la COVID-19 no puede ser una excusa para seguir aumentando la producción de plásticos, no podemos bajar la guardia, debemos seguir avanzando en la eliminación de los plásticos de un solo uso y en una nueva economía circular.

Por ello, el Fondo Mundial para la Naturaleza (Por sus siglas en inglés, WWF) pidió responsabilidad a todos los ciudadanos que solo arrojen sus guantes y mascarillas al contenedor de restos y a los habilitados para tal fin y que, siempre que sea posible, apuesten por mascarillas reutilizables y reduzcan el uso de guantes, mediante un lavado frecuente de manos como recomiendan las autoridades.

Asimismo, la WWF pide a nivel global un acuerdo contra el plástico que fije objetivos ambiciosos de reducción de la contaminación por plásticos para los países miembros y la obligación de planes nacionales para alcanzar esos objetivos. Además, a las empresas exigió que establezcan planes para eliminar los plásticos de un sólo uso de todos sus productos y la apuesta decidida por la economía circular.

Fuente: WWF