Aseguran que la agricultura familiar debe modernizarse para ser productiva y sostenible

La sostenibilidad de la agricultura transcurre un período crítico. Cada año disminuyen las áreas de producción agrícola, los suelos pierden productividad y las temperaturas son más extremas debido al cambio climático. Según Yara, la compañía de nutrición de cultivos para el futuro, resulta urgente modernizar la agricultura familiar en los países de Latinoamérica para lograr la seguridad alimentaria y proteger al planeta.

“La agricultura familiar se caracteriza por el tamaño de la unidad agrícola menor a 5 hectáreas, una mano de obra predominantemente familiar y el limitado acceso al capital y, por ende, a tecnología de vanguardia. En Latinoamérica, la agricultura familiar es responsable de la producción del 67% de los alimentos de la región; sin embargo, su productividad por hectárea es insuficiente de cara al futuro tomando en consideración que para el año 2050 habrán 9.5 mil millones de personas y se necesitará producir 60% más alimentos para satisfacer la demanda mundial”, comentó Paulo Yvan, director regional de Yara South Pacific.

En el marco del Lanzamiento del Decenio de las Naciones Unidas de la Agricultura Familiar (2019-2028), Julio Berdegué, representante regional de la FAO, manifestó que los Gobiernos de América Latina deberán impulsar programas y políticas para que la agricultura familiar enfrente de manera exitosa los efectos del cambio climático, adopte nuevas tecnologías y contribuya a satisfacer la demanda alimentaria mundial.

“En los próximos 11 años el 40% de la superficie total de Latinoamérica habrá alcanzado, o superado, el umbral de dos grados centígrados. Simple y sencillamente, no será posible practicar la agricultura tal y como la conocemos hoy. Si no actuamos ya, la agricultura familiar enfrentará una situación que sólo puedo calificar de catastrófica. Gobiernos deben contribuir a realizar una transformación radical en el sector”, señaló.

Efectivamente, la productividad agrícola se ha visto afectada por el cambio climático en los últimos años según afirma el ejecutivo de Yara, la compañía de nutrición cultivos para el futuro. “Cada año las condiciones climáticas dificultan las labores en campo, atraen plagas, generan sequías o aumenta la incidencia de precipitaciones severas, trayendo por consecuencia una disminución en la productividad. Nosotros trabajamos con cientos de miles de pequeños y medianos agricultores en toda la región y podemos dar fe de ello. Deben proteger sus cultivos de manera eficiente y para ello la transferencia de conocimientos es vital; sin embargo, también es importante que modernicen su práctica agrícola”.

En el caso de Perú, existen 2 millones 200 mil unidades agropecuarias según el último Censo Nacional Agropecuario (Cenagro 2012), de las cuales el 97% están en manos de las familias agricultoras, quienes no tienen acceso a nuevas tecnologías para ser más productivos. Solamente el 41% de las unidades agropecuarias de la agricultura familiar cuentan con riego; mientras que, únicamente el 45% aplica algún tipo de fertilización en sus suelos.

“Para incrementar los rendimientos y mejorar la calidad de los cultivos es fundamental el acceso al riego y la aplicación de insumos agrícolas de calidad como semillas certificadas y fertilizantes con micronutrientes. La fertilización es el alimento para las plantas. Mientras más nutrientes obtenga, mayor será su resistencia frente al clima y las plagas y mayor será el rendimiento y la calidad del cultivo. Para lograr la seguridad alimentaria, es necesario producir más alimento de calidad en menos espacio y con menos recursos”, señaló Paulo Yvan de Yara.

Para Yara, la agricultura familiar debe ser productiva, pero también sostenible. Las plantas absorben los nutrientes que están disponibles en el suelo para poder alimentarse y crecer. Si al suelo no se le devuelve los nutrientes que está agotando, su productividad será cada vez menor. Por lo tanto, el no aplicar fertilizantes es una práctica perjudicial para la sostenibilidad del suelo y el medioambiente, porque cuando pierde productividad ya no es útil para el agricultor, entonces va la selva o al bosque y tala una hectárea más para explotar los recursos disponibles en el suelo.

La propuesta del Minagri

La Ministra de Agricultura, Fabiola Muñoz, anunció que este año su sector presentará el Plan Nacional de Agricultura Familiar para impulsar y beneficiar a los pequeños productores del campo y mejorar su capacidad productiva con el objetivo de resguardar la seguridad alimentaria y contribuir a mejorar la calidad de los cultivos. “Los pequeños productores necesitan capacitarse, tener conocimientos, aprender, por ejemplo, buenas prácticas como un control oportuno de plagas y enfermedades, siembra y riego, manejo integral del cultivo, entre otros.”

Mencionó, además, que es necesario trabajar desde el Estado teniendo una visión de sistema, donde no solo participe el sector agricultura sino también otros sectores, para llegar con un conjunto de servicios que permita mejorar la agricultura familiar, la cual está en zonas de pobreza, haciéndola más vulnerable y más expuesta a los efectos climáticos, económicos y sociales.

En tanto, los gremios empresariales expresaron su apoyo a los esfuerzos del Minagri para atender a la pequeña agricultura familiar. De esta manera mejorar su producción y competitividad. “Las empresas privadas y gremios de la industria de insumos agrícolas estamos muy interesados en colaborar a través de acompañamiento en el campo con programas de transferencia de conocimiento en manejo integral de los cultivos para los productores familiares. De hecho, contamos con la experiencia y un equipo de especialistas agronomómicos que conocen la realidad del agro peruano”, finalizó Paulo Yvan.

Dato:

  • Según la Encuesta Nacional de Hogares (ENAHO), en la Agricultura Familiar (AF) laboran más de tres millones de personas (83% de la fuerza laboral agrícola) y genera cerca del 80% de los productos alimenticios que se consumen en el mercado nacional.