El hospital de Llata cada vez más cerca. Filemón Sudario, secretario de Cultura y Educación del Frente de Defensa de los Intereses de Llata (Fredill), expresó su confianza en que el Estado peruano honrará los plazos para la pronta construcción del hospital de Llata. Se sabe que esta se iniciaría en el mes de julio. Además, expresó que un clima de diálogo es vital para que finalmente la población pueda ser beneficiada con los servicios a los que accederá en el futuro nosocomio.
Sin embargo, citó que hay “población que permanece incrédula”, pues para algunos los anuncios (de las autoridades) han perdido algo de credibilidad en cierto modo porque no se han cumplido con los acuerdos”. Al respecto, invocó a la población “a tener la paciencia que hemos tenido, que no se rompa el dialogo, porque esa es la mejor vía para llegar a un acuerdo”.
Agregó que “el plazo que ha dado el viceministro, es el último plazo diríamos, y mientras se culminen los pasos pendientes, podemos esperar que se inicien las obras. Como buenos demócratas creemos que la mejor vía es el diálogo, no hay otro mecanismo, respetándonos unos a otros”.
Recordó que solo falta convocar a proceso para supervisión de la obra; y el inicio de esta. El dirigente del Fredill remarcó que lo que se espera ahora es que se informe si ya se culminó con el proceso de supervisión citado para luego saber la fecha exacta de inicio de la construcción del hospital de Llata.
“Se dijo en un momento que se iniciaría en la segunda quincena de noviembre, pero desde enero estamos esperando y pasan los meses”, recordó. Respecto a la demora, citó que influyeron “cambios en el Gobierno, en el Gabinete, cambio de asesores en los ministerios. Sin embargo, es clave que el viceministro que está a cargo del proyecto sigue al frente”.
Otro tema pendiente vinculado al inicio de las obras es el de la habilitación urbana, tema a cargo de la Municipalidad Provincial de Huamalíes. Citó que alcalde actual ha manifestado su buena voluntad y acción para resolver este impase. Hay un pequeño tramo de acceso al cementerio que es algo problemático, pero es subsanable, consideró.
Finalmente, desmintió categóricamente las versiones alegando que el presupuesto asignado a la construcción del hospital de Llata pase a ser invertido a otra región. “Creemos en la palabra de los interlocutores del Estado”, acotó.