Nuevamente el grupo senderista de la facción “proseguir”, ha cometido un atentado terrorista: una emboscada contra dos patrullas militares que se desplazaban de la base militar de Sanabamba hacia el centro poblado Supichipampa, distrito de Ayahuanco, en la provincia de Huanta, dejando como saldo – hasta el cierre de esta edición – 14 militares asesinados y 4 heridos.
Desde INFOREGION rechazamos esta acción criminal contra las Fuerzas Armadas y expresamos nuestras condolencias con los familiares de todas las víctimas.
Según nuestras fuentes, las patrullas estaban compuestas por varios jóvenes soldados que prestaban servicio militar en la base militar de Pichari, VRAE.
Sin embargo, de acuerdo a la versión de algunos familiares directos, los soldados habrían sido reclutados de manera involuntaria e, incluso, contaban con apenas dos o tres meses de preparación, no se sabe si habían sido entrenados para este tipo de maniobras.
Al respecto, la Defensoría del Pueblo de Pucallpa ha anunciado que realizará una investigación. Como se recuerda el servicio militar en el Perú es voluntario y las “levas” fueron prohibidas hace varios años.
En los últimos meses, el Estado ha reforzado su voluntad política para enfrentar la presencia del narcotráfico y los remanentes senderistas.
Hace poco, durante la sesión del Consejo de Ministros realizada en Pichari, VRAE, el Primer Ministro, Yehude Simon, anunció una inversión de 1,471 millones de soles en carreteras, puentes y telecomunicaciones entre el 2006 y el 2011; el ministro de Defensa Antero Flores Aráoz ha suscrito innumerables convenios con entidades públicas y privadas para llevar desarrollo a la zona.
Por su parte, las entidades locales y regionales vienen impulsando cultivos lícitos como el café, el cacao, el sacha inchi, con miras a la exportación.
Los alcaldes de la Asociación de Municipalidades del Río Apurímac y Ene, AMUVRAE vienen demandado desde hace un buen tiempo seguridad y desarrollo para su región, incluso con sus propios recursos han aportado a la construcción de las comisarías en Pichari y Sivia. Todo un esfuerzo civil encaminado al desarrollo de la zona.
Entonces ¿qué está pasando? La presencia del Estado se viene dando de a pocos, es cierto que no es suficiente pero cada vez está más presente.
Lo que parece estar fallando es la estrategia militar del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, a cargo del general Contreras. ¿Cómo se puede enviar a una patrulla de soldados del servicio militar a una zona con presencia senderista del grupo criminal “proseguir”? No hay que ser un estratega militar para darse cuenta que eso es enviarlos a una emboscada segura.
Asimismo, cabe preguntarse que se está haciendo con los recursos del gas de Camisea destinados al Fondo de Defensa, recuérdese que los distritos de Pichari y Kimbiri, en el VRAE, otorgan parte de sus ingresos de canon gasífero a este Fondo.
Corresponde apoyar los esfuerzos civiles políticos de promover desarrollo en la zona, pero hay que reiterar la responsabilidad de las fuerzas del orden de realizar su trabajo de manera profesional y con una visión a largo plazo, que tenga en cuenta el desarrollo coordinado con las autoridades civiles y el respeto a los derechos humanos.
En esta ocasión no hay pretextos que argumentar: hay recursos y hay voluntad política, hace falta un drástico cambio de dirección militar.