El Área Clave de Biodiversidad (ACB) Kosñipata-Carabaya, “puente ecológico” de alta importancia biológica y ecosistémica, posee una inmensa riqueza cultural y está situada en la Amazonía suroriental, entre el Parque Nacional del Manu y la Reserva Comunal Amarakaeri. La urgencia de proteger este territorio fue el eje en torno al cual giró, en Lima, el encuentro de múltiples actores, entre ellos autoridades locales, regionales, nacionales y otros sectores.
Se identificaron las posibles alternativas de conservación de este paisaje que forma parte de uno de los 35 hotspots más diversos del planeta. El diálogo sirvió para marcar el inicio de una hoja de ruta conjunta para que autoridades del Gobierno Regional de Cusco, la Municipalidad Distrital de Kosñipata, la sociedad civil y el sector privado empresarial decidirán en los próximos meses la mejor fórmula para conservar este territorio de más de 93 mil hectáreas, cabecera de cuenca del río Alto Madre de Dios.
El evento contó con la participación de Marc Dourojeanni, investigador de las ciencias forestales y fundador de Pronaturaleza, quien expuso sobre la importancia estratégica de conectar áreas de alto valor de biodiversidad; de Roxana Ramos, directora técnica de la institución, que expuso sobre los resultados de la investigación desarrollada por Pronaturaleza y las oportunidades de conservación y desarrollo sostenible que posee la zona.
Además, intervino Ney Ríos, especialista internacional, quien reportó que -de la evaluación hecha en diferentes escenarios de emisiones de gases de efecto invernadero- se concluye que la pérdida de los bosques de la zona sería más letal para su capacidad de provisión de servicios ecosistémicos hídricos que el embate del cambio climático. Esto evidencia la importancia del ACB Kosñipata-Carabaya, que se constituye en un activo natural estratégico de las sociedades que lo habitan ante este cambio global.
Luego, se desarrolló un panel entre actores locales y regionales de Cusco como Miguel Ángel Atausupa, gerente regional de Recursos Naturales y Gestión del Medio Ambiente; Robinson Quispe, director regional de Energía y Minas; Libio Efraín Toque, alcalde distrital de Kosñipata; Justo Delgado Rupa, subgerente de la Oficina de Desarrollo Económico Local (ODEL) de Kosñipata; Doris Mamani, representante de la sociedad civil local; Irma Rojas, presidenta del Comité de Apoyo a la Reserva de la Biosfera del Manu; y Cecilio Huamantupa, presidente de la Asociación de Prestadores de Servicios Turísticos Kosñipata Manu.
También asistieron representantes de instituciones nacionales como Benjamín Lau, director de Desarrollo Estratégico de Sernanp; Fabiola Nuñez, directora de Conservación de Ecosistemas y Especies de la Dirección General de Diversidad Biológica del Minam; Beatriz Dapozzo, directora de Catastro, Zonificación y Ordenamiento de Serfor; y Jaime Bendezú, especialista de la Dirección de Políticas y Competitividad de Serfor, quienes contribuyeron al análisis integral para identificar alternativas viables para la protección efectiva de este territorio.
Todos los presentes coincidieron en la importancia de conservar el ACB Kosñipata-Carabaya, en la visión de un paisaje unitario que integre el interés local para conservarla con el apoyo regional y nacional, en la apuesta por la gestión pública del territorio. Dourojeanni, asimismo, sugirió a los integrantes del panel que sumaran sus esfuerzos y criterios para crear un área de conservación única gestionada por los sectores y niveles que sean necesarios para una mayor sostenibilidad de la alternativa a implementar. Esta propuesta encontró amplia aceptación entre los asistentes.
Fausto Amado, coordinador de Reserva de Biosfera en el Distrito de Kosñipata, resaltó que éste es un proceso nacido del interés local por conservar el área, en el cual han contado con la asistencia técnica de Pronatualeza, institución que ha desarrollado investigación específica sobre el ACB, y solicitó que se continúe acompañando este proceso, así como destacó la importancia de que los resultados de la jornada en Lima sean presentados ante los actores locales en Kosñipata, dando cuenta del avance de la hoja de ruta que emprendieron en marzo de este año para lograr la protección de este territorio vital para las 45 mil personas que lo habitan.
El evento se cerró con la firma de un Convenio Marco de Cooperación Interinstitucional para la gestión de la Biodiversidad y el Desarrollo Sostenible de la Región del Cusco entre el Gobierno Regional de Cusco y Pronaturaleza – Fundación Peruana para la Conservación de la Naturaleza. Las partes se comprometieron a conservar el patrimonio natural y cultural cusqueño.
Para ello, abordandarán la gestión sostenible de la biodiversidad, servicios ecosistémicos y ecosistemas frágiles, la protección de los pueblos indígenas en aislamiento voluntario y contacto inicial (Piaci), la mitigación y adaptación al cambio climático, el desarrollo de bionegocios para la puesta en valor de la biodiversidad nativa , el monitoreo ambiental participativo y, en general, el desarrollo sostenible regional.
El evento “Área Clave de Biodiversidad Kosñipata-Carabaya: Oportunidades para la conservación del territorio entre el Parque Nacional del Manu y la Reserva Comunal Amarakaeri” se realizó en el marco del proyecto “Integración de estrategias de conservación del Área Clave de Biodiversidad Kosñipata-Carabaya en la gestión pública local y regional de la Amazonia sur-oriental del Perú”, se informó a INFOREGIÓN.