Un cóndor andino (Vultur gryphus), macho, juvenil, a cargo del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor) del Ministerio de Agricultura y Riego fue liberado en la zona altoandina de Lima, en la comunidad de Carania, en la provincia de Yauyos a 4 200 m.s.n.m.
Se trata de la quinta liberación realizada por el Serfor de esta majestuosa ave andina, por lo que en una de sus alas lleva una banda de color amarillo con el número cinco, el cual puede ser vista en estado silvestre. Al tener dos años de edad, el ejemplar aún no presenta el collar blanco característico.
El cóndor fue encontrado en diciembre del 2016 deshidratado, sin apetito y sin poder volar, por un poblador de la zona a orillas del río Alis en la localidad homónima y llevado al puesto de control de la Reserva Paisajística Nor Yauyos-Cochas, administrada por el Servicio Nacional del Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp), organismo dependiente del Ministerio del Ambiente.
La liberación corona un exitoso proceso de gestión y manejo de fauna silvestre de un año, liderado por el Serfor, en coordinación con sus Administraciones Técnicas Forestal y de Fauna Silvestre (Atffs) de Lima y Sierra Central; con el Sernanp y el invalorable apoyo de aliados estratégicos como el zoocriadero El Huayco de Lima.
Tras ser encontrado, el cóndor andino fue entregado en custodia temporal por la Atffs Sierra Central al Zoológico Municipal de Huancayo, donde fue puesto en observación en un ambiente aislado para evitar el riesgo de contagio de posibles enfermedades y facilitar su alimentación y rehidratación en condiciones libres de estrés.
Posteriormente, el Serfor, a través de la Atffs Lima, trasladó el ave al zoocriadero El Huayco de propiedad de José Antonio Otero, ubicado en Lima. Allí, el Serfor construyó un recinto especial para la recuperación y manejo de aves de gran envergadura. De esta manera, el ave pudo ejercitar el vuelo junto a un espécimen macho adulto de su misma especie, a fin de adquirir destrezas y patrones de conducta necesarios para la supervivencia en libertad.
Tras evaluar su comportamiento, se determinó que el ave reunía las condiciones necesarias, tales como alimentarse solo, respetar la jerarquía, volar sin dificultad y controlar el aterrizaje, y sobre todo rehuir a la presencia humana. Adicionalmente, fue sometida a pruebas médicas para conocer su estado de salud. Así, se descartó la presencia de parásitos, de trazos de plomo y de algún patógeno, con lo cual no existiría peligro sanitario cuando interactúe con otros ejemplares silvestres.
Cabe recordar que, en el Perú, el cóndor andino es una especie categorizada como en peligro de extinción y se encuentra protegida por el Estado Peruano. A nivel internacional, está protegido por la Convención Sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestre (Cites) y por la Convención para la Conservación de Especies Migratorias, de las cuales el Perú forma parte.
Las principales causas de la reducción de la población de esta especie son la caza y captura ilegal para el uso de ejemplares en fiestas tradicionales y la comercialización de sus plumas y partes; la intoxicación y envenenamiento a los que son sometidos por la falsa creencia que cazan ganado; así como la disminución de la calidad del hábitat.
La distribución geográfica de esta ave en el Perú abarca las regiones de Piura, Lambayeque, Ancash, Lima, Ayacucho, Ica, Arequipa, Cusco, Puno, Apurímac, Amazonas, Moquegua, se informó a INFOREGIÓN.