La Comisión de Pueblos Andinos, Amazónicos, Afroperuanos, Ambiente y Ecología (CPAAAAE) del Congreso publicó el dictamen final de la Ley Marco de Cambio Climático. No obstante, el destino de esta ley es incierto, dado que aún no se agenda su debate en el Pleno del Congreso.
La Ley de Cambio Climático deberá permitir articular a los diferentes sectores y niveles de gobierno para enfrentar y prevenir los agudos impactos del Cambio Climático en nuestro país, se informó a INFOREGIÓN.
“Es una buena propuesta que no debe ponerse a dormir hasta el próximo año. El cambio climático no espera nuevas Legislaturas, a riesgo de seguir inactivos hasta que se repitan inundaciones, cortes de agua u otros impactos que se manifiesten en los próximos meses”, dijo César Gamboa, director ejecutivo de Derecho, Ambiente y Recursos Naturales (DAR).
Tres Claves del Dictamen
El dictamen reconoce el carácter vinculante de los instrumentos de gestión climática. Con ello, las contribuciones nacionalmente determinadas o compromisos nacionales del Perú ante instancias internacionales -como reducir hasta en un 30% nuestras emisiones de gases de efecto invernadero hasta el 2030-, serán formalmente de cumplimiento obligatorio.
Por otro lado, el dictamen plantea un equilibrio entre las políticas dirigidas a reducir las emisiones del país (mitigación), y las dirigidas a buscar estrategias para lidiar y prevenir los impactos del cambio climático, al adaptarnos a este fenómeno (adaptación).
No obstante, aunque esta postura en principio es buena, la situación de nuestro país no es de equilibrio. Nuestra geografía, desigualdad y economía hacen muy vulnerables a nuestras poblaciones, servicios públicos, recursos naturales e infraestructura. Por ello, solo se podrá lograr un verdadero equilibrio priorizando la adaptación, destinando mayores recursos, capacidades e iniciativas hacia este enfoque; además de propiciar una integración con la mitigación.
Finalmente, es necesario asegurar la participación de la población en las decisiones sobre el cambio climático mediante una instancia que la garantice. En ese sentido, se propone que la Comisión Nacional de Cambio Climático, reconocida en el dictamen, se convierta en el principal espacio de la Gobernanza Climática, por lo que debe participar en el diseño, gestión, monitoreo, evaluación y fiscalización de todos los instrumentos, medidas y mecanismos climáticos de nivel nacional.