Con el fin de contribuir con el desarrollo del comercio ético en nuestro país, la joyería peruana Sissai obtuvo una certificación bajo el Estándar de Minería Justa Fairmined para garantizar la procedencia sostenible del oro y plata que emplea en la elaboración de sus productos.
De esta manera, Sissai se convirtió en la primera joyería peruana licenciada por la Alianza por la Minería Responsable (ARM) con el fin de promover el aprovechamiento sostenible de los recursos naturales en las comunidades mineras. Además, se destacó que este tipo de iniciativas a favor del medio ambiente les permite obtener beneficios a los mineros a través del Premio Faimined, el cual les otorga un valor económico adicional por gramo de material producido.
Por su parte, las diseñadoras y fundadoras de la marca, Ximena Ceballos y Pamela Ceballos, coincidieron en destacar la necesidad de promover un comercio ético por parte de las comunidades mineras con el objetivo de cumplir con los altos estándares de calidad requeridos por los consumidores internacionales, quienes prefieren adquirir productos que no le provoquen daños al medio ambiente.
“Diseñar es algo que nos apasiona y llevar nuestro trabajo a un nivel mucho mayor al apoyar el desarrollo sostenible de comunidades artesanales y la protección del medio ambiente es algo que nos motiva a seguir avanzando. Es por eso que apostamos por la minería responsable como opción viable para contribuir con el desarrollo sostenible de nuestro país”, indicaron.
Por otro lado, destacaron los logros obtenidos dos empresas mineras peruanas que se beneficiaron a través de la certificación del Sello Fairmined, ya que consiguieron comercializar sus productos en los mercados de Europa y Estados Unidos. Además, señalaron que estas empresas actualmente vienen trabajando con la ONG Solidaridad que trabaja con cadenas de comercio sostenible y la Alianza por la Minería Responsable logrando abatecer a diversos .
Cabe señalar que el caso más reconocido es el de la comunidad minera de Ayacucho «Aurela» que logró obtener beneficios económicos al formar parte de la cadena de abastecimiento ético.