Un helicóptero Mi-8 que transportaba a tres tripulantes y dos oficiales rusos fue derribado en la provincia de Idlib, en Siria, cuando se disponía a regresar a una base aérea rusa ubicada en la costa de Siria. Este evento ocurrió después de que los soldados rusos entregaran apoyo humanitario a los damnificados de Alepo.
Cabe destacar que este incidente se produjo un día después de que el Estado Islámico anunciara que comenzaría a perpetrar ataques en el territorio ruso. Por su parte, el vocero del presidente Vladimir Putin señaló que el comunicado emitido por el Ministerio de Defensa confirmaría que todos los pasajeros que viajaban en el helicóptero habrían perdido la vida durante el ataque.
«Por lo que sabemos de la información proporcionada por el ministerio de Defensa, todos a bordo del helicóptero murieron», acotó.
Del mismo modo, el vocero Dmitry Peskov destacó la valerosa acción de los soldados rusos, quienes trataron de alejar el helicóptero del territorio para evitar mayores daños provocados por este ataque.
“Los rusos murieron heroicamente porque trataron de alejar el aparato para minimizar las pérdidas en el terreno», declaró Peskov.
Asimismo, se indicó que los testigos del hecho tomaron fotos del acontecimiento con sus teléfonos celulares, mientras gritaban «Allahu akbar» que significa “Dios es grande” en árabe. Además, se informó que este sería el atentado más grave que habría sufrido el ejército ruso desde septiembre del año pasado, cuando Moscú decidió intervenir en la guerra civil de Siria y comenzó a realizar operaciones aéreas para apoyar a las fuerzas del presidente sirio, Bashar Al Assad.
Por otro lado, se señaló que hasta el momento nadie se ha hecho responsable del ataque a pesar de que en provincia de Idlib hay una fuerte presencia del Frente Nusra, filial de Al Qaeda y de grupos rebeldes. No obstante, se indicó que la semana pasada, el frente anunció que renunciaba a las relaciones que mantenía con Al Qaeda para evitar una campaña rusa- estadounidense en su contra.
Además, se destacó que este hecho ocurrió un día después de que los rebeldes sirios perpetraran un ataque para destruir el sitio del gobierno sobre partes del este de la ciudad de Alepo, que actualmente está siendo dominada por la insurgencia.