Tres suboficiales de 3ra de la Policía Nacional murieron hoy por impactos de bala en el marco del desalojo de los invasores del Santuario Histórico Bosque de Pómac, en la provincia de Ferreñafe, en Lambayeque, en cumplimiento de una orden judicial.
El hecho se habría producido luego de una «emboscada» que sufrieron los agentes policiales en el sector Palería II, una parte de las 1,200 hectáreas del área de conservación lambayecana que se encuentra invadida desde hace años.
Los policías, no se encontraban armados y tan solo portaban equipos para disuadir a los invasores.
Las víctimas mortales fueron identificadas como Carlos Alberto Peralta Castillo y Fernando Hidalgo Ibarra, de la Dirección Nacional de Operaciones Especiales, DINOES quienes fallecieron en forma instantánea cuando fueron alcanzados por impactos de fusiles de largo alcance.
En horas de la noche se confirmó la muerte de un tercer suboficial, Percy Tarifa G, que había quedado gravemente herido cuando francotiradores ocultos entre los algarrobos del bosque abrieron fuego contra ellos.
Asimismo, otros dos efectivos policiales resultaron heridos y fueron evacuados rápidamente de la zona en helicóptero de la Aviación Policial.
También dos periodistas locales sufrieron la violencia de los invasores del Bosque de Pómac. Los hombres de prensa fueron heridos en las piernas y actuamente se encuentran en condición estable.
Condenan actos violentos
Mientras tantoen comunicado oficial, el ministerio del Interior precisó que fueron detenidos veinte civiles y se incautó munición de fusil AKM y una escopeta artesanal recientemente accionada.
Se indicó asimismo que se dispuso la inmediata presencia de equipos de la Dirección de Investigación Criminal y de la Dirección Contra el Terrorismo de la Policía Nacional, para investigar e identificar a los autores de la muerte de los efectivos policiales y ponerlos a disposición del Ministerio Público.
Asimismo, se ha determinado que personal de inteligencia policial realice las acciones pertinentes, a fin de ubicar a los elementos instigadores y agitadores, cuya presencia ha sido revelada por la gravedad de los hechos.
El Ministerio del Interior condenó enérgicamente estos actos, que enlutan a la Policía Nacional, y manifestó su disposición a preservar el orden público actuando estrictamente en el marco de la ley y con respeto de los derechos humanos.
Estaban armados y había francotiradores
Carlos Elera Arévalo, director del Museo Sicán de Ferreñafe, precisó que los autores del crimen, no serían campesinos de la zona sino gente armada y francotiradores apostados para eviotar el desalojo del santuario.
El funcionario precisó que se ha observado invasores con armas automáticas y fusiles, así como gente azuzando para evitar que los pobladores abandonen el lugar.
Medios radiales de la zona, informaron que los invasores también dejaron artefactos explosivos, que fueron desactivadas por la policía así como tinajas con combustible listas para estallar .
«Los invasores están haciendo menoscabo de la democracia utilizando armas de fuego”, manifestó Elera quien precisó que el desalojo continuará.
El año pasado, la Corte Suprema emitió un fallo ordenando la desocupación del Santuario Nacional, con el auxilio de la fuerza pública, de las más de 1,200 hectáreas invadidas en los sectores Palería I y II.
El Santuario Nacional Bosque de Pómac tiene un área total de 5,887 que concentra una variada flora y fauna en vías de extinción, además de un rico patrimonio arqueológico.