El Ministerio de Cultura declaró como Patrimonio Cultural de la Nación a la danza Jija Ruku, la misma que es originaria de Llata, distrito localizado en la provincia de Huamalíes, en Huánuco.
La decisión del Ministerio de Cultura se tomó debido a que el Jija Ruku posee «gran riqueza simbólica en sus personajes y coreografía, constituye un elemento de continuidad cultural y diálogo intercultural», se informó a INFOREGIÓN.
Jija Ruku proviene de dos palabras quechuas: jija, que procede de la palabra hirka (montaña sagrada) y ruku, vocablo que nombra al varón anciano. El personaje principal es un anciano, el ruku, quien es un intermediario entre el mundo divino y de los humanos.
La coreografía de la danza es parsimoniosa y de ritmo pausado que se intercala con tonadas ligeras ejecutadas por un músico conocido como ‘cajero’.
Para ejecutar la danza intervienen 20 bailarines, quienes danzan en dos columnas. La representación está compuesta por dos momentos principales: el desplazamiento de la comparsa (pasacalle) y el desarrollo de diversas figuras coreográficas.
Esta danza se ejecuta del 12 al 16 de setiembre durante la faena en honor al Señor de la Exaltación, patrono de Huancabamba. También se interpreta durante las celebraciones por Fiestas Patrias.