Narcotráfico amenaza de muerte al Parque Nacional Bahuaja Sonene

El narcotráfico y minería ilegal son dos actividades delictivas que amenazan de muerte al Parque Nacional Bahuaja Sonene, un espacio natural que resulta indispensable para la supervivencia de la humanidad.

Ubicado en la provincia de Tambopata (Madre de Dios), así como en las provincias de Carabaya y Sandia (Puno), la extensión de este parque nacional es de un 1 091 416 hectáreas, las cuales están amenazadas por la actividad ilegal que desarrollan el narcotráfico y la minería ilegal, depredando la flora y fauna, según ha denunciado el Gobierno Regional de Puno.

Las autoridades reclaman la urgencia de proteger esta reserva y que se verifique por satélite o con el patrullaje de helicópteros hasta dónde está avanzando la actividad ilegal y sobre todo la destrucción de los bosques.

Mauricio Rodríguez, expresidente regional de Puno, ha hecho un dramático llamado a las fuerzas del orden y a la Comisión de Alto Nivel contra la Minería Ilegal para que adopten medidas urgentes y drásticas contra estas organizaciones criminales, y salven esta zona vital de la Amazonía de su destrucción.

Los propios pobladores han reportado la presencia de extraños, especialmente en la zona que limita con el vecino país de Bolivia. Para muchos, el parque Bahuaja Sonene se ha convertido en una nueva ruta del narcotráfico.

LO BUENO Y LO MALO

El particular clima y los niveles de altitud de su territorio favorecen una mayor biodiversidad que ha sido objeto de estudio y admiración por diversas organizaciones ambientalistas a nivel mundial.

El Bahuaja Sonene mantiene un potencial representado en el 20 por ciento de riqueza de flora y fauna en el Perú; donde se han registrado 10 000 especies distintas de árboles y plantas, 174 especies de mamíferos, 570 de aves, 100 de reptiles y anfibios, 232 de peces, además de 1 200 especies de mariposas.

Por eso, la presencia de bandas organizadas de la droga plantea el peligro que esos hermosos parajes pronto se conviertan en campos de cultivo para la hoja de coca, principal insumo de la cocaína.

Asimismo, atraerán a taladores ilegales y mineros informales. Mientras unos se tiran abajo al bosque para extraer el recurso maderable más fino, los otros van a empezar a ingresar químicos para sacar el mineral. El resultado: serios daños al ecosistema. Hay que detenerlos.