El economista ambiental Dennis Pereyra señaló que la región Huánuco está aún fuertemente influenciada por el tráfico ilícito de drogas y la producción de hoja de coca al punto que durante el 2007, el 8.4 por ciento de la economía huanuqueña provino de la hoja de coca ilegal.
Fue al refutar recientes declaraciones del presidente regional de Huánuco Jorge Espinoza, quien aseguró que las acciones del terrorismo y el narcotráfico en la zona eran casi nulas.
«Respeto la posición del presidente del gobierno regional pero no las comparto, al parecer no está informado de la magnitud que tiene el problema del narcotráfico y el terrorismo en Huánuco», comentó en diálogo con INFOREGIÓN.
Fuerte influencia del narcotráfico
Pereyra precisó que «la región Huánuco todavía está fuertemente influenciada por el tráfico ilícito de drogas y la consecuente producción de hoja de coca en el campo».
En ese sentido, detalló que el valor de la hoja de coca en Huánuco aún alcanza niveles importantes en la economía de la región. “Durante el 2007, el 8.4 por ciento de la economía huanuqueña provino de la hoja de coca ilegal” apuntó.
“Es decir que de cada 100 soles que movió la economía regional de Huánuco el año pasado, 8.40 soles provinieron de la hoja de coca ilegal que se produce en la región” alertó Pereyra al tiempo que consideró alta la cifra en comparación con la que se registra en las regiones de Ucayali y San Martín.
Al respecto, detalló que en Ucayali la hoja de coca ilegal representa apenas el uno por ciento de la economía local, mientras que en San Martín el porcentaje es aún menor y llega solo al 0.3 por ciento.
Mayor producción de coca ilegal se da en el Monzón
El analista identificó cuatro provincias huanuqueñas en donde la incidencia de la hoja de coca destinada al narcotráfico genera una situación crítica.
Indicó que las provincias con mayor presencia de cultivos ilegales de coca son, en orden de prioridad, Huamalíes – con énfasis en el distrito del Monzón -, Leoncio Prado, Cholón y Puerto Inca.
Finalmente, el especialista consideró lamentable que los productores cocaleros no se puedan poner de acuerdo con los representantes del gobierno nacional en la búsqueda de una solución a sus reclamos.
Atribuyó esta situación al hecho de que el narcotráfico se encuentra detrás de la paralización cocalera. «Todos sabemos que cuando hay este tipo de paralizaciones y huelgas se aprovecha para seguir produciendo hoja de coca y no solamente eso sino que el destino final es el trafico ilícito de drogas», puntualizó.