Denuncian que Inteligencia del Ejército detuvo injustamente a dos comerciantes de Chimbote

Un nuevo caso de abuso a los derechos humanos afectó a dos comerciantes de Chimbote, quienes fueron detenidos y golpeados por miembros de Inteligencia del Ejército pertenecientes a la Segunda Brigada de Infantería, bajo la falsa acusación de ser altos mandos de Sendero Luminoso.
 
Los agraviados, Emil y Ricardo Zavaleta Infantes, denunciaron que los sucesos ocurrieron el pasado martes, al promediar las siete de la mañana, en las inmediaciones del paradero Huanta.


Ese día en efecto, fuentes de inteligencia militar dieron a conocer la captura de Víctor Quispe Palomino (a) José o Iván, uno de los líderes del Comité Centro Principal, CCP, de Sendero Luminoso, facción que opera en el Valle de los Ríos Apurímac y Ene, VRAE, en un paradero de transporte urbano de Huamanga.  Horas mas tarde sin embargo, las mismas fuentes descartaron esa importante captura.  


Comerciantes chimbotanos
Según el testimonio de los hermanos, consignado hoy en el diario La Jornada, de Huamanga,  ambos, dedicados al comercio de pescado seco, acababan de arribar a Huamanga provenientes de Lima, para luego dirigirse a San Francisco, VRAE, para vender sus productos.
 
Minutos antes de partir al VRAE, Ricardo Zavaleta se separó de su hermano para comprar pilas de linterna y grande fue su sorpresa cuando al regresar vio que Emil era reducido en el suelo, siendo víctima de la sustracción de sus bienes y de golpes por parte de cinco sujetos.
 
Ricardo Zavaleta Infantes acudió en su ayuda, por lo que también fue golpeado y acusado de ser terrorista.
 
«¡Tú eres el camarada José y tú eres Iván! ¡Ya perdieron!… gritaron los militares, de acuerdo con el testimonio de las víctimas, consignado hoy en el diario Jornada de Huamanga.
 
Luego, los hermanos fueron subidos a golpes a una camioneta y trasladados al cuartel Los Cabitos, donde fueron golpeados y amenazados de muerte durante más de seis horas. 


No eran trerroristas 
Emil Zavaleta precisó que luego de casi seis horas de «reclusión» llegó un representante del Ministerio Público, quien les confirmó que se trataba de una equivocación y que sus identidades no correspondían a los buscados senderistas José e Iván.
 
«Es increíble el abuso que hemos sufrido y no se lo deseamos a nadie. Fuimos amenazados de muerte y golpeados  sin motivo alguno. Esta vez rebasaron todos los límites y no descansaremos hasta lograr justicia y sanción ejemplar para esos malos militares», señaló.
 
Por su parte Paola Capcha, abogada de los agraviados, denunció públicamente los abusos cometidos por los integrantes de la Segunda Brigada de Infantería y exigió que sean identificados y sancionados ejemplarmente para que situaciones similares no se vuelvan a repetir.
 
Señaló que luego de permanecer seis horas detenidos, sus patrocinados fueron derivados a la Policía Nacional, a la sede de la DIRCOTE para continuar con las investigaciones, que condujeron finalmente a la liberación de ambos hermanos.
 
«Con el pretexto de la lucha contra el terrorismo, las Fuerzas Armadas vienen cometiendo abusos en perjuicio de gente humilde e inocente. Lamentablemente, frente a esos abusos no hay sanciones ejemplares, sino protección a estos malos militares», sostuvo Paola Capcha.