En el último día del año, siendo las 5 de la tarde, un inusitado movimiento de policías en la puerta del Gobierno Regional de Madre de Dios alertó a los hombres de prensa. Al preguntar sobre el tema, la respuesta los paralizó. En esos instantes iba a salir el Gerente del Infraestructura, Marco Antonio Romero Torres, “enmarrocado” por haber sido encontrado infraganti, recibiendo una coima de 7,500 soles.
Minutos después, Marco Romero Torres era sacado de su propia oficina para ser trasladado a las instalaciones de la sede policial anticorrupción.
Según la información policial, el denunciante fue Jorge Luis Peña Quijandría en representación de Holmer Mendoza, representante legal del Consorcio Madre de Dios, quien efectuó la denuncia ante el mismo presidente regional, Jorge Aldazábal Soto.
El Fiscal Dionisio Quicaña Quispe, actuó contando con la denuncia y además audios de conversaciones entre Romero Torres y el denunciante, en los que se evidenciaba que Marco Romero pedía la suma de 7,500 soles a cambio de la suscripción de la liquidación de la obra, según informó a INFOREGIÓN.
Según el denunciante, la entrega del dinero se produciría en las próximas horas, por lo que el Fiscal montó el operativo con el apoyo de la Policía Anticorrupción de Puerto Maldonado, interviniendo in fraganti a Romero Torres, en su misma oficina con la suma de los 7,500 nuevos soles que tenía en su poder, por lo que fue detenido. Junto a Romero Torres, se detuvo también a Jorge Median Carhuawilca, quien habría sido el intermediario.
Esa misma noche previa a la celebración del Año Nuevo, Marco Romero y su cómplice fueron trasladados a las instalaciones de la Policial Anticorrupción, donde fue interrogado por más de tres horas y ya en horas de la madrugada fue trasladado a la carceleta de la Corte Superior de Justicia.