El ministro de Agricultura, Juan Manuel Benites, anunció que una de las principales prioridades de su sector el próximo año será el financiamiento de proyectos para impulsar la agricultura familiar, como el fondo Mi Riego, la aceleración de los planes de Obras por Impuestos, la titulación de tierras y el plan de reconversión productiva en el Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem).
En entrevista con el diario el Peruano, agregó que también se potenciará la innovación agraria y la incorporación de nuevas tecnologías para impulsar la modernización del campo, en virtud al préstamo de US$ 180 millones del Banco Mundial y del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) otorgado para el fortalecimiento del Instituto Nacional de Innovación Agraria (INIA), entre otras acciones.
Asimismo aseguró que, como sucedió este año, en 2015 el Minagri seguirá apoyando el desarrollo de la agricultura familiar, para lo que se está destinando el 61% de los recursos a esa actividad.
Explicó que estos recursos se desprenden de los diversos programas y acciones que ejecutará el ministerio, como el fondo Mi Riego (450 millones de nuevos soles), el plan de reconversión productiva en el Vraem (105 millones de nuevos soles) y el plan de renovación de cafetales en zonas afectadas por la roya amarilla (100 millones de nuevos soles), entre otras acciones.
De otro lado, el titular de Agricultura destacó que unas 63,000 familias de pequeños productores ingresarán al mercado gracias a la implementación del “Programa Presupuestal de Articulación de los Pequeños Productores al Mercado”, cuyo presupuesto asciende a más de 320 millones de soles.
Indicó que este plan considera la intervención en acciones de asociatividad, innovación tecnológica, financiamiento agrario, información de mercados y comercialización de productos agropecuarios.
Asimismo, afirmó que el desarrollo de la agricultura familiar será uno de los principales objetivos del Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri) durante el 2015, ya que es una estrategia efectiva de lucha contra la pobreza en las zonas más alejadas, y representa al 83% de la fuerza laboral en el agro (Andina).