Comunidad de Siusa gana «Premio Cáritas a una Comunidad Sostenible»

Siusa, comunidad altoandina ubicada en la provincia de Calca, en Cusco, fue elegida como modelo de desarrollo integral y sostenible por Cáritas del Perú, a través del «Premio Cáritas a una Comunidad Sostenible”, en el marco de la Campaña “Una sola familia humana, alimentos para todos”; que busca sensibilizar a la sociedad sobre el problema del hambre que afecta a más de 842 millones de personas en todo el mundo.

El Premio fue entregado a Rosas Curo, representante de la comunidad de Siusa por el trabajo y organización de las 80 familias que mediante la implementación de un sistema de riego por aspersión, la preparación y uso de abonos orgánicos lograron incrementar la disponibilidad y consumo de alimentos en su comunidad. Además, las familias de Siusa mejoraron sus prácticas de salud y nutrición e implementaron viviendas mejoradas con el acompañamiento de Cáritas Cusco.

Un jurado calificador, compuesto por especialistas en seguridad alimentaria y representantes de Cáritas del Perú, declaró ganadora esta experiencia denominada “Desarrollo integral y sostenible en la Comunidad Indígena Campesina de Siusa, en la provincia de Calca, en Cusco” por ser la propuesta que abarcó de manera integral todos los componentes vinculados a la seguridad alimentaria.

Rosas Curo, poblador de la comunidad de Siusa, llegó hasta Lima a recibir este reconocimiento. “Nuestra comunidad,  a pesar de estar ubicada en un lugar crítico, ha sabido valorar los recursos que tenía para trabajar de manera sostenible la producción alimentaria, los recursos hídricos y la recuperación de nuestras costumbres. Hemos revalorado el trabajo con granos andinos, como quinua, habas, arvejas y hemos empezados a procesar productos como la papa y la oca de manera sostenible”, manifestó a INFOREGIÓN.

El representante de la comunidad explicó que a pesar de no contar con restos arqueológicos, la población ha logrado convertir a Siusa en una comunidad atractiva para el turismo vivencial, lo que ha mejorado sus ingresos familiares.

“Tenemos nuestras costumbres, nuestros trajes originarios, nuestras artesanías  y gracias a eso recibimos a turistas de todo el mundo que llegan para ver cómo vivimos y se quedan para aprender  nuestras tradiciones”, agregó.

Hay que destacar que en segundo lugar del Premio lo obtuvo la experiencia de la comunidad de Mariscal Cáceres, en Huancavelica, quienes lograron la certificación orgánica del cultivo de papa nativa con el apoyo de Cáritas Huancavelica.

Cabe indicar que este premio se creó para reconocer el esfuerzo desarrollado por aquellas comunidades que hayan logrado modos de vida sostenibles, tanto en la producción y mejora de alimentos,  erradicación de la desnutrición y del hambre.

En esta primera edición del «Premio Cáritas a una Comunidad Sostenible” participaron comunidades  de todo el país con programas y proyectos que desarrollaron junto a la Red  de Cáritas Diocesanas a nivel nacional.

Cáritas del Perú espera que este incentivo sirva de estímulo a otras comunidades del país a llevar adelante iniciativas de desarrollo que les permita alcanzar mejores condiciones de vida.